El Consejo Administrativo del SAMIC de El Calafate decidió por mayoría, despedir a la mujer que fue detenida en su lugar de trabajo el 19 de agosto, cuando el juzgado federal de Río Gallegos ordenó secuestrar un cargamento de drogas, detenciones, y allanamientos.

Al mismo tiempo que la mujer era detenida en el hospital local, su pareja también era apresado por la policía. Horas antes, el conductor del camión donde venía la droga, era interceptado y también quedaba a disposición del juzgado federal.

En la actualidad el conductor del camión está en libertad porque no hay pruebas que lo involucren en el delito, un hombre de apellido Melloni quedó procesado con prisión preventiva como principal responsable de la carga de los 7 kilos de droga, mientras que su pareja, la enfermera de apellido Gauna quedó en libertad pero procesada.

El hospital consultó al juzgado de Río Gallegos sobre la situación de la mujer. La respuesta fue que se encuentra procesada sin prisión preventiva como participe del delito de la comercialización de estupefacientes.

Con la información judicial, las autoridades del hospital resolvieron el despido «sin causa» de la enfermera.

La ley laboral contempla el despido «sin causa» de un empleado, pero con el pago de indemnización, por lo que la enfermera cobró poco mas de 1 millón de pesos.

El despido ordenado es independiente de la causa judicial. De hecho, la responsabilidad de la mujer en un posible delito recién se mostrará en un juicio. Pero el Consejo Administrativo del hospital resolvió el despido para que la imagen de la institución no quede asociada a una empleada cuestionada por un delito federal.
(Información de Ahora Calafate)