Conectarse con nosotros

NACIONALES

Frutas, verduras, fideos, aceite, azúcar y huevos: la lista de alimentos que subieron más de 120% en un año

Publicado

el



Se trata de productos que conforman la canasta básica. Según el INDEC, el rubro alimenticio es el de mayor incidencia en el IPC de todas las regiones del país.

La suba de precios de los alimentos alcanzó el 6,2% en octubre y acumuló un alza del 91,6% en los últimos 12 meses, según informó este martes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC). Se trató del rubro que más incidió en la inflación de todas las regiones, con verduras, tubérculos, legumbres y frutas como los productos que más se incrementaron, todos estacionales.

Los alimentos que forman parte de la canasta de los sectores más desprotegidos se encuentran entre los que mayor aumento de precio registraron en la comparación interanual. En el top 10 se encuentran cebolla, papa, batata, azúcar, aceite de girasol, huevos de gallina, fideos secos tipo guisero, café molido y harina de trigo común 000, todos por encima del 120%, y hamburguesas congeladas, apenas rozando ese porcentaje.

Los únicos tres productos cuyo aumento interanual no superó el 50% fueron arroz blanco simple, tomate entero en conserva y tomate redondo.

Top 10 de los alimentos que más subieron de precio
De acuerdo con los datos del INDEC, la cebolla fue el alimento que más subió de precio en octubre respecto del mismo mes de 2021, al pasar de $56,67 a $380,97, el kilo, lo que representó un incremento del 572,26% en apenas 12 meses. La papa le siguió de cerca, con un aumento del 323,87%, al subir de $52,86 a $224,06 el kilo. En ambos casos se trata de productos básicos de consumo para la mayoría de las familias argentinas.

El tercer aumento más alto fue el de la batata, que pasó de $82,07 a $307,11 el kilo, lo que representó una suba de 274,20%. El azúcar se incrementó 214,83% (subió de $78,87 a 248,31 por kilo); mientras que el aceite de girasol creció un 146,22% (de $290,33 a $714,85 el litro).

Por debajo se ubicaron los huevos de gallina, 145,27% (pasaron de $153,69 a $376,96 la docena); los fideos secos tipo guisero, 128,44% (de $77,52 a $177,09 el medio kilo); el café molido, 124,96% (de $429,75 a $966,76 el medio kilo); la harina de trigo común 000, 123,26% (de $59,29 a $132,37 el kilo) y las hamburguesas congeladas, 119,58% (de $310,7 a $682,25 por cuatro unidades), el único producto que no superó el 120% interanual dentro del top 10.

De las diez frutas y verduras que releva el INDEC dentro del Índice de Precios al Consumidor (IPC), tres encabezan los primeros tres alimentos y bebidas que más subieron de precio, y en total son cinco las que forman parte del top 20 (cebolla, papa, batata, manzana deliciosa y zapallo anco). Todos más que duplicando su valor en apenas un año.

Solo dos, lechuga y tomate redondo, se encuentran entre los cinco que menos subieron, pero con cifras también muy altas, 62,94% y 20,04% interanual, respectivamente.


NACIONALES

En Diputados creen que la ley ómnibus se aprueba la semana que viene pero que los senadores la van a hundir

Publicado

el


La oposición tiene los números para hacer cambios en particular. La Rosada ya dice que ningún capítulo es de vida o muerte.

En la Cámara de Diputados creen que la ley ómnibus se terminará aprobando la semana que viene pero que luego caerá sin atenuantes en el Senado.

La Cámara alta nunca trató la ley ni en comisión porque no pasó el filtro de Diputados. Allí el terreno es mucho más complejo para el gobierno, como quedó demostrado con el DNU que cayó por amplia mayoría.

Los senadores se quieren cobrar los insultos incesantes de Milei, que la semana pasada los graficó como ratas luego de que se aumentaran el sueldo. «Están decididos a destruir la ley».

En Diputados tampoco el Gobierno tiene un camino recto. Si bien ya asoman los números de la mayoría para la votación en general, que ya se habían conseguido el 2 de febrero en la primera versión de la ley, la votación en particular puede sufrir cambios.

Así como sucedió con la privatización del Banco Nación, que fue sacada de la ley en las últimas horas, capítulos como el de lavado pueden sufrir cambios en el recinto, más allá de los acuerdos con los que llega el oficialismo al día de la votación.

En Diputados creen que la ley ómnibus se aprueba la semana que viene pero que los senadores la van a hundir

Cuando entra un negativo, como se dice en la jerga parlamentaria al momento en que se voltea un artículo de la ley en tratamiento, la votación se «espiraliza». Esto quiere decir que los diputados se envalentonan contra el Gobierno y buscan más cambios, tal como sucedió en la votación en particular de la primera ley ómnibus, lo que la llevó al naufragio.

En ese momento quien debe tener la muñeca para negociar es el presidente de la Cámara, ayudado por sus operadores de recinto. Cuando Emilio Monzó era titular de Diputados, su operador era Nicolás Massot. Sergio Massa tenía a Cecilia Moreau y Paula Penacca. Los operadores de recinto son los que recorren las bancas durante la sesión para evitar sorpresas.

El Gobierno tiene un problema grande con eso. No tiene operadores de recinto, con un bloque balcanizado tras la salida de Oscar Zago. Y en especial, Martín Menem no demostró la experiencia para manejar la sesión cuando se la complican.

En Diputados creen que la ley ómnibus se aprueba la semana que viene pero que los senadores la van a hundir

Y los números que tiene el gobierno en Diputados anticipan que la votación en particular se va a complicar. La oposición podría juntar 126 diputados, que no alcanzan para dar quórum pero sí para voltear artículos o la ley entera una vez que comienza la sesión. Es que cuando ya se consiguió el quórum, la mayoría se calcula respecto de los diputados presentes. Como siempre faltan diputados que se enferman o viajan, con 126 diputados la oposición puede tener mayoría.

A ese número llegan con los 99 diputados de Unión por la Patria, más 5 de izquierda, 2 santacruceños, 11 radicales de Facundo Manes y Emiliano Yacobitti, y hasta 11 del bloque de Miguel Pichetto.

‘La ley es un monstruo sin cabeza que va caminando por el Congreso’, dicen los diputados que la quieren votar para sacársela de encima. El clima es de hastío por el proceso de cuatro meses que se tornó insoportable.

La bancada de Pichetto puede ir mutando en cantidad de votos negativos de acuerdo a cada artículo en particular. Los dos socialistas, Esteban Paulón y Mónica Fein, están muy enfrentados al Gobierno. Juan Brugge y Natalia de la Sota responden a Massa. Los seis lilitos no quieren votar las facultades delegadas y Margarita Stolbizer firmó un dictamen aparte con los socialistas.

Además se suman 8 diputados de Innovación Federal que buscarán introducir el capítulo del tabaco que el Gobierno quitó de la ley. «Si no lo logran quizás hagan una maldad», explicaron a LPO fuentes parlamentarias.

Como si no bastara con lo fino del cálculo, el Gobierno, que dejó como interlocutor al vicejefe de gabinete, José Rolandi, no reclama ningún punto como indispensable.

«La ley es un monstruo sin cabeza que va caminando por el Congreso», dicen los diputados que la quieren votar para sacársela de encima. El clima es de hastío por el proceso de cuatro meses que se tornó insoportable.

La bronca de los diputados no es sólo con la Rosada sino también con los gobernadores: creen que se borraron y no dieron la cara en las últimas semanas previas al tratamiento de la ley. El bloque libertario, en tanto, ni participa de las reuniones en las que se negocian los pedazos de la ley. 


Seguir leyendo

Más leídas - últimas 48Hs.