Uno de los fallecidos era funcionario de la autoridad aeronáutica civil y el otro uno de los ladrones, que quisieron robar 32,5 millones de dólares.

Un intento de robo durante la mañana del miércoles a un camión de caudales en el aeropuerto de Santiago de Chile dejó dos personas muertas en medio de un intenso tiroteo, según informaron la Policía y los medios de prensa locales.

Una de las personas fallecidas era funcionario de la autoridad aeronáutica civil DGAC y la otra uno de los asaltantes, confirmó a Reuters la Policía de Investigaciones, que de momento no proporcionó más detalles.

El viceministro del Interior, Manuel Monsalve, informó a la prensa que en torno a las 8.00 hora local (1100 GMT), una decena de hombres ingresó a la losa del aeropuerto en tres camionetas, tras maniatar al encargado de una caseta de seguridad.

Posteriormente se dirigieron a uno de los terminales de descarga del aeropuerto, donde había un avión de la aerolínea LATAM procedente de Miami que portaba 32,5 millones de dólares, añadió el oficial. El robo no se concretó.

«En ese lugar se produce un enfrentamiento entre los delincuentes y funcionarios de la DGAC que pertenecen a la sección de seguridad aeroportuaria. Es trabajo personal y armado. Se produce un intenso intercambio de disparos», relató el funcionario, que dijo que se diseñó un fiscal para investigar el caso y que se identificó a dos personas que podrían estar vinculadas a los hechos.

El jefe de la DGAC, general Raúl Jorquera, manifestó a los periodistas que no existió riesgo a pasajeros y que los delincuentes tenían «alta capacidad de fuego para tratar de robar el transporte de valores que estaba programado para este día».

En videos que circulaban por las redes sociales se oían numerosos disparos.

De acuerdo con medios locales, unos 12 hombres fuertemente armados ingresaron en tres camionetas a la losa de la terminal para tratar de robar el camión de valores, pero fueron repelidos por funcionarios de la autoridad aeronáutica.

En videos que circulaban por las redes sociales se oían numerosos disparos.

El país sudamericano es uno de los más estables y seguros de la región, pero las autoridades reconocen que en los últimos años aumentaron los crímenes violentos.

(Con información de Reuters)