Se fue de la presidencia del bloque de Unión por la Patria, aunque aclaró que no del bloque. El recuerdo de Perón y Néstor Kirchner. La relación con Cristina Fernández y los tres problemas estructurales que atraviesa Santa Cruz por la mirada del Gobierno Nacional.

El diputado provincial Daniel Peralta estuvo en el centro de la política de Unión por la Patria, luego que renunciara a la presidencia del bloque en la Cámara de Diputados. A través de redes sociales y con una foto en Yacimientos Carboníferos Río Turbio (su corazón sigue en la Cuenca), anunció su renuncia a la presidencia al espacio de la oposición. Mucho se especuló con un acercamiento a Somos Energía para Renovar (SER) del gobernador Claudio Vidal, aunque lo desmintió rotundamente. Peralta sigue, no sacó los pies del plato –como en el 2007, lo recuerda con nostalgia incluso- y se mantiene dentro.

Sabe que su salida trajo revuelo tanto hacia afuera como puertas adentro y es justamente en su espacio de dirigencia o militancia desde donde quiere reconstruir. Pero la política lo atraviesa en su vida personal: se emociona cuando habla de la educación que le dio su mamá Polola; cuando recuerda a Juan Domingo Perón y cuando Néstor Kirchner entra en la conversación. Quienes ya no están, para él están más presentes que nunca.

Para Peralta el peronismo, en su forma del Partido Justicialista o Unión por la Patria, debe darse una seria discusión bajo la premisa que “no hay 2027 sin 2025”, incluyendo en medio elecciones internas dentro del PJ para decidir candidatos. Quiere que los nombres que encabecen boletas sean elegidos y avalados desde el partido. “Santa Cruz tiene que resolver de Ramón Santos para adentro”, apuntó en una entrevista exclusiva a TiempoSur tras su renuncia a la presidencia del bloque.

“Hay que hacer internas. Los candidatos deben ser elegidos por elecciones de nuestros afiliados. No está mal preparar una compulsa con muchos candidatos. Yo lo digo una, dos o tres veces. La cuarta no hablo nada y veremos. Hay mucha gente en la casa que fue olvidada, ninguneada y perseguida. Va a haber que ir a curarle las heridas”, analizó Peralta, quien indicó que nadie va a venir a poner candidatos y que las Unidades Básicas no se deben quedar esperando.

Peralta pidió meter el menos ruido político posible a la realidad nacional y provincial. En una coyuntura económica adversa, el legislador pidió bajar cambios en la discusión partidaria, pero dejó en claro que sigue dentro de UxP. “No hay ruptura, me fui, renuncié de la presidencia. No hay ruptura en el bloque. Lo que tiene que haber es un cambio de orientación de la vocación parlamentaria que deben tener los diputados”, indicó.

“Fueron duros momentos, pero dialogamos y hablamos, la política se trata de eso. No de decir que somos vidalistas o peraltistas. El bloque se va a reconstruir, elegirá autoridades”, continuó, lamentando que hasta ahora se sigue intentando formalizar de manera orgánica. Explicó que hay dos jefes en los legisladores: Pablo Grasso y Javier Belloni. “Tengo que respetar la voluntad popular de quienes nos ungieron”, insistió.

“Yo voy a ser y discutir en mi bloque cada decisión que haya que tomar para aportar lo que pueda que esos 10 diputados sean 10 votos en línea.  Solo me fui de la presidencia”, sostuvo Peralta. Puertas adentro, discutirá lo que tenga que discutir, pero insistió –una vez más- que sigue dentro del bloque y el espacio.

“Tengo una visión crítica hacia adelante. El peronismo debe ir a elecciones internas para ver quiénes son los candidatos. Se necesita, aunque vuelva a perder, discutir internamente quiénes serán los candidatos”.

Para Peralta, debe caer la Ley de Lemas. Algo que viene reclamando una parte de la comunidad política y ciudadana incluso desde que él era gobernador.

“Nadie se tiene que enojar ni ofender. El peronismo lo tomó como un movimiento, hay que reactivar consejos locales, reactivar el PJ y darle contenido. Los diferentes espacios deben desarrollarse, potenciando a su militancia, entender además que finalmente es ese partido el que nos va a representar en espacios del campo popular”, recalcó.

El Diputado provincial indicó que un Gobierno Nacional que no paga, que corta la obra pública, claramente va a tener un superávit fiscal. El ejemplo con la economía familiar no falta. Pero reconoce que la llegada de Javier Milei a Nación corresponde también a errores propios del peronismo, un espacio que está parado desde la vereda de la oposición. Con esto, remarca que el peronismo se mantiene siempre, incluso regresando a veces como elemento organizador social y económico.

Pero en este escenario ve problemas estructurales graves a nivel nacional y con una fuerte repercusión en Santa Cruz. La triada de la producción: YPF, YCRT y Represas. La primera se va, la segunda está en una nebulosa y la tercera está paralizada.

“El Gobernador tuvo muchos problemas y no es solo la percepción. No soy un exégeta, pero entró con el ímpetu y energía. Consideró algo positivo que fue a pintar las escuelas. Eso no fue bueno. El gesto está bien, pero resulta que tenés que tener un plan de mantenimiento efectivo y concreto de planificación y estructura, que no pasa lo que pasó ahora”, recalcó.

Incuestionable

La relación con Cristina Fernández se mantiene. Ayer ella habló a nivel nacional desde Quilmes y Peralta sabía que iba a escucharla. Para él, su impronta e importancia es incuestionable, aunque sabe que ella misma pidió abrirse de las candidaturas para dar espacios a otros nombres.

“Un día me llamó preocupada cuando empezó a sentir las noticias del retiro de YPF. No sabía nada, no tenía información. Tampoco la tengo ahora. Cristina planteó el tema con claridad de energía y tarifas: son cosas que pueden dañar el tejido social de una manera irreparable”, alertó el Diputado Provincial. Nombres por ahora, tiene varios para conducir el PJ nacional. Con muchos compartió espacios en diferentes puntos históricos de la provincia. Pero quiere que las provincias tengan voz y voto.

La cuestión regional para Peralta debe tener una armonía con la mirada nacional, algo que no existe hoy. Recordó a su par chubutense, Mario Das Neves, y los desafíos que atravesaron durante la gestión de ambos. No se pudo bajar a Tierra del Fuego ni subir a Río Negro, rememoró.

“Las políticas regionales pueden ser un dolor de cabeza si no están atadas a Nación. Estas no tienen nada que ver con el plan de Milei. Un solo sector de Santa Cruz beneficiado por la política nacional no  hay», lamentó.

Lo que viene

Ahora Peralta integra un bloque opositor, en un espacio que estuvo acostumbrado a ser oficialismo durante años. Espera que se puedan armar estrategias propositivas a la crisis económica que se atraviesa, para dar respuesta a cuestiones como YPF e YCRT. Indicó que el Gobernador debe retrotraer despidos y plantarse firme por los intereses de Santa Cruz.

“Creo que hay que frenar el aumentazo gigante que viene y también creo que la dirigencia debe tener cuidado con lo que dice. No soy de personalizar, pero hubo un ministro que dijo y calificó la foto de Calafate como el tren fantasma. Eso habilita que la respuesta tenga el mismo tenor”, dijo.

“Tenemos mucho para aportar legislativamente y técnicamente hablando. Ahora, tratemos de sacar el ruido político, porque en la Legislatura, en definitiva, tenemos sesiones cada dos semanas, donde tenemos un nivel de debate tenue, he visto cámaras pesadas. Pero le pedí al Gobernador cuando me preguntó sobre las emergencias, que estábamos de acuerdo. Al menos queremos el consenso, pero tuvo la deferencia de convocarme y siempre agradezco eso porque fui gobernador. Cuando te convocan, lo tenés que tomar. Soy un tipo que viene del mismo sector, del sindicalismo. No voy a ningunearlo a Vidal, no es mi enemigo. Es un adversario circunstancial que supo construir poder para llegar al gobierno con una ingeniería electoral que le dio resultado. No es un marciano”,  puso en orden Peralta.

“Mi enemigo son los que persiguen gente en la administración pública; el revanchismo permanente en la Legislatura. Mis enemigos son las injusticias. Hace ocho años estoy fuera de la función pública hasta que vino el desafío de YCRT. Pero me la aguanté. Porque fui todo lo que puede ser, una persona que está en política, haber tenido el honor de ser gobernador”, cerró Peralta. Con información de Tiempo Sur