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Quiénes son los diputados que respaldaron la movilización universitaria pero no quisieron dar quorum

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De Martín Tetaz y Rodrigo De Loredo, a Silvia Lospenatto y pasando por Florencio Randazzo y Miguel Ángel Pichetto, varios diputados marcharon o se pronunciaron a favor la movilización universitaria. Eso sí, no aparecieron por el Congreso cuando se convocó a la sesión para tratar el presupuesto del nivel superior.

«Eh, dá el quorum para el presupuesto, sorete.» El video se viralizó. Un chofer de colectivo aprovechó el embotellamiento sobre Rivadavia, sacó la cabeza por la ventanilla y le dedicó esas palabras al titular del bloque de la UCR, Rodrigo De Loredo, que poco antes no había bajado al recinto de la Cámara de Diputados para habilitar la sesión para que se trate el proyecto de la oposición que buscaba incrementar el presupuesto de las universidades públicas

De Loredo no fue el único legislador que, durante la histórica marcha del martes, se expresó a favor de la educación pública, pero menos de 24 horas después decidió seguir negociando con el Gobierno y no respaldar el proyecto opositor para respuestas al reclamo. Martín Tetaz y Julio Cobos por el radicalismo, Miguel Ángel Pichetto (Hacemos Coalición Federal) o Silvia Lospenatto desde la bancada del PRO tampoco bajaron al recinto, midiendo más los tiempos políticos de lo que se podía entender como una victoria de Unión por la Patria, que el reclamo que se replicó ayer en todo el país. 

Antes de ser sorprendido por los gritos del chofer, mientras era entrevistado en vivo  los canales de televisión, De Loredo había sido consultado por los reclamos que ya había recibido ayer en su Córdoba capital, donde participó de la movilización con la «Juventud radical», entre gritos que le exigían que abandonara la plaza. Eso no lo hizo cambiar en su posición dialoguista con el Gobierno e incluso negó lo ocurrido al decir «a mí la gente me trató bien». Luego llegaría la desmentida del chofer. 

En la mañana del miércoles, Unión por la Patria, con el acompañamiento de diputados radicales díscolos de la conducción De Loredo –los cercanos a Facundo Manes–, del bloque de diputados de Santa Cruz, cuatro del bloque de Haciendo Coalición Federal y el Frente de Izquierda; quedaron a solo 5 diputados –124 de 129– de conseguir el quorum para abrir el debate sobre el presupuesto universitario, la reposición del Fondo de Incentivo Docente y la movilidad jubilatoria. 

Los proyectos presentados por Unión por la Patria, contuvieron propuestas de bloques como la Coalición Cívica y Haciendo Coalición Federal en un intento de negociación que se venía tejiendo desde antes de la histórico marcha universitaria de ayer.  En principio, se quería sesionar en la tardenoche del martes, pero los dialoguistas lo empujaron para el miércoles en medio de una negociación que dejaron caer. 

A pesar de no sentarse a debatir sobre lo que reclamaron un millón de personas en las calles de todo el país, los legisladores sí usaron las redes sociales durante estos días para mostrarse sensibles al reclamo que desbordó al Gobierno hasta en los foros virtuales que tantos resultado le dieron al presidente Javier Milei.  

Pichetto, multifácetico titular del bloque Hacemos Coalición Federal, se encargó la noche anterior a la marcha de ir al canal LN+ a plantear su posición a favor de la universidad pública ante los periodistas oficialistas Esteban Trebucq y Luis Majul; hablando de «la opción del ascenso social en la Argentina», video que fijó en sus redes con un mensaje crítico sobre «un presupuesto anclado en 2023» con una inflación del «del 250 por ciento» y exigió al Gobierno que lo resuelva por Roca y por Sarmiento. Pero no bajó al recinto a tratar la propuesta de los bloques opositores. 

El radical economista Martín Tetaz cambió su foto de perfil de X para mostrarse con una remera con la sigla UNLP (Universidad Nacional de La Plata) y también modificó su nombre de perfil, en tono irónico,  por «Las fuerzas de la educación pública». Subió videos de la movilización, publicó documentos que demuestran la licuación del presupuesto y criticó a Milei. Pero no bajó a dar quórum. 

El ex vicepresidente Julio Cobos participó de la masiva movilización por la universidad pública en Mendoza. Usó sus redes para compartir las imágenes y decir que «la educación nos hace libres», que «la multitudinaria marcha se ve la importancia de la educación», que hay que «reflexionar con las enseñanzas de este día democrático». Pero no bajó a dar quorum. 

La diputada Lospenatto, recordada por su discurso de cierre durante el debate por la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo, también escribió en sus redes que «la Argentina que queremos ser necesita sostener la Universidad Pública gratuita, federal y de calidad», mostrarse orgullosa de ser «primera generación de universitarios» en su familai y que la movilización era el «reconocimiento al valor social que tiene la universidad pública para millones de argentinos». 

Pero Lospenatto tampoco bajó a dar quorum ni debate. Algo que sinceró al coincidir con el discurso del presidente Milei respecto de que la masiva movilización se podía «partidizar»  y «usarla para otros fines políticos que desvirtúen ese objetivo común». Argumentos calcados a los utilizados por De Loredo antes de quedar desautorizado por el chofer de colectivo. 

Dentro del PRO, la diputada y ex gobernadora María Eugenia Vidal también se había anticipado a las palabras que hoy escribió Milei en sus redes –después de tomar un té con «lágrimas de zurdo» anoche– mostrando la sintonía del macrismo con La Libertad Avanza. «Yo nunca escuché a Milei decir que va a cerrar las universidades públicas. Es una discusión de presupuesto, no quiero adelantar«, explicó en una entrevista a Canal 9


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El 2001, la pandemia y el macrismo ya quedaron chicos

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En abril, el consumo en hipermercados cayó 15,4, números que no se veían desde el estallido social de De La Rua. La UIA confirmó que la industria cayó 17,2 por ciento en marzo, muy por encima del industricidio del PRO y cerca del parate total por la COVID. Con la obra pública cerrada por el Gobierno, los tres sectores que explican la mayor parte del PBI se han desmoronado en tiempo récord. Fuertes disputas en las entidades empresarias por el apoyo que le dan a Milei mientras la economía se pulveriza. 
Leandro Renou

Por Leandro Renou

En sólo cinco meses de Gobierno, los números muestran que la gestión económica de Javier Milei superó ampliamente los derrumbes de actividad de las tres crisis más relevantes de los últimos años: el 2001, la pandemia de la COVID y los años de Mauricio Macri. Por un lado, Página I12 accedió a un adelanto del informe de la consultora Scentia de abril, que refleja un desplome del 15,4 por ciento en las ventas de hipermercados, una caída similar a la del estallido del gobierno De La Rua; por su lado, la Unión Industrial (UIA) confirmó que en marzo la actividad fabril cayó 17,2 por ciento, emparejando los niveles de diciembre del 2001 y cayendo más que en la parte más dura de la pandemia. A este dato se suma el derrumbe de la construcción, superior al 42 por ciento, lo que deriva en un escenario inédito: en tiempo récord, la gestión de Milei y Luis Caputo pusieron a las tres actividades que explican la mayor parte del PBI en una situación de dificil retorno.

Por esta perspectiva, que ya se veía venir, los economistas empezaron a alertar hace unas semanas que el nivel de la recesión, autogenerada para intentar morigerar una inflación que sigue muy alta, era el dato central a observar. Lo curioso es que este momento de crisis casi total de la actividad se da en paralelo al apoyo que empresarios de la Cámara Argentina de la Construcción, la Cámara de Comercio y la propia UIA, le dan al gobierno de Milei, a quien estuvieron escuchando y aplaudiendo hace unas horas, en su exposición en el almuerzo que organizó el Consejo del Comercio y la Producción (Cicyp) en el Hotel Alvear. A raíz de estos datos, este diario habló con dirigentes de todos esos sectores consultando cómo y hasta cuándo se sostiene el discurso de apoyo a la línea Milei cuando la actividad a la baja ya se está cargando al empleo. «Es la pregunta del millón», contestó un alto dirigente de UIA. En esa sede de la gremial empresaria hay una guerra entre pymes y gigantes por el contexto de crisis, que se está llevando puestas a las más chicas. Por toda esa tensión, muchas cámaras como los metalúrgicos de ADIMRA y los texiles de Protejer decidieron salir por las suyas a denunciar que el proceso de crisis no frena y terminará en cierres de empresas. 

En este escenario, el consumo masivo es que el primero sintió el ajuste en los salarios, las jubilaciones pisadas y la liberación del resto de los bienes y servicios de la economía, que terminaron privando a las familias de mayores compras de alimentos. Según Scentia, la caída del 15,4 en ventas en los grandes supermercados de abril es la más grande desde el 2001-2002. «Quedó lejos incluso de los números muy negativos del macrismo», explicó un líder del supermercadismo multinacional. En los años del PRO, el consumo masivo medido por Scentia cayó tres de los cuatro años, quedando empatado en el período restante. Lo particular del consumo es que todos los rubros están cayendo, pero algunos como Bebidas, Aceites y Lácteos se desploman desde el 20 al 50 por ciento mensual. 

Esa baja en el gasto de los hogares está directamente conectada, además, con el desempeño de las fábricas. En el reporte de la UIA se muestra que la industria de Alimentos cayó 10,2 por ciento en abril, un número del que nadie tiene antecedentes, porque en general el sector crece, aún en los peores períodos, de manera marginal en relación con el crecimiento poblacional. El derrumbe de todos los sectores que muestra la UIA produjo una caída general de la actividad que supera o se equipara al 2001 y queda muy por encima de la pandemia de COVID. 

En 2001, medido por el INDEC, el sector industrial terminó cayendo 6,2 por ciento. Mientras que en diciembre de ese año, la baja fue de 18,4 por ciento. ¿Qué pasó co la COVID? En el primer semestre del 2020, el período de mayores restricciones a la circulación y la actividad, la industria cayó 18,4 por ciento. Teniendo su pico más negativo en abril, con una baja del 33 por ciento. Luego de eso, arrancó una curva ascendente que dejó al 2021 con números positivos. Hoy, en sólo un mes, retrocedió 17,2 por ciento, pero en condiciones normales, no pandémicas

Lo particular de estos datos, aseguran los especialistas, es que las caídas tan bruscas por sectores ya adelantan no sólo números negativos hacia adelante, sino un golpe que se ve en los puestos de trabajo. Daniel Funes de Rioja, titular de la UIA, aseguró hace unos días que las fábricas perdieron ya 5000 puestos de trabajo, pero ese dato es previo a los 100 despidos en FATE, Acindar, los supermercados, PEPSICO y General Motors, todas cesantías que ocurrieron en las últimas horas. A eso se suman los 100 mil empleos menos que tiene la actividad de la construcción producto de la decisión de Milei de cerrar la obra pública y los que se están dando en el sector comercial. 


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