NACIONALES
Vaca Muerta con aires de revolución

«Venimos a sumarnos a esta revolución energética», dijo el ministro de Economía en Neuquén antes de lanzar un abanico de fuertes incentivos al sector petrolero

Una vez más, en el corto período que lleva al frente del Ministerio de Economía, Sergio Massa le dio el máximo énfasis al sector energético en su perspectiva de desarrollo económico. Aprovechó la convocatoria empresaria sectorial que significa la Exposición Oil & Gas Patagonia, que arrancó el miércoles y culmina este viernes en Neuquén, para lanzar una ola de anuncios de inversiones en infraestructura, beneficios cambiarios y aduaneros para empresas petroleras, un «blindaje jurídico» para las cláusulas especiales que favorecen a los contratos de exportación de hidrocarburos, y ofreció créditos para inversiones de las empresas pymes de servicios al sector.
En el cierre de su discurso, y hablándole principalmente a los sectores empresarios y trabajadores petroleros que se desempeñan en Vaca Muerta, Massa señaló: «Vinimos a sumarnos a esa enorma revolución energética que ustedes están llevando adelante, a decirles que le damos un valor estratégico como Nación y como gobierno; venimos a ponernos al servicio de esa enorme tarea que empresarios y trabajadores realizan y para que la suma sea empresarios, trabajadores, provincias y estado nacional; construyendo la revolución energética que le dé soberanía a la Argentina pero, sobre todo, un cambio definitivo de matriz y de balanza comercial».
No sólo los titulares de firmas petroleras y de energía en general recibieron con entusiasmo los beneficios enumerados. También el gobernador neuquino Omar Gutiérrez celebró sus palabras y cubrió de elogios al ministro. Entre los empresarios se vio a Marcelo Mindlin (Pampa Energía), a esta altura casi infaltable en cualquier acto que tenga a Massa como protagonista; Manfred Boeckmann (Wintershall Dea); Germán Macchi (Pluspetrol); Ricardo Rodríguez (Shell); Ernesto López Anadón (Instituto Argentino del Petróleo y el Gas) y el titular de YPF, Pablo González.
Uno de los anuncios más relevantes para el interés de las empresas petroleras, fue que se «avanza en la reglamentación del decreto que le da al sector, a partir del 1° de enero, una enorme cantidad de ventajas competitivas sobre el crecimiento de la producción, que presume la libre disponibilidad de divisas para aquellos que invierten en la medida que haya crecimiento de la producción». Es decir, que un porcentaje de lo que exporten, cuando estas ventas al exterior sean a partir de un aumento de la producción, no estará obligada a liquidarse en el mercado de cambios y podrán conservarlos en dólares.
«Ese mismo decreto establece la ininterrumpibilidad de los contratos de exportación que surjan del crecimiento de la producción de las empresas. Cuidamos primero el abastecimiento al mercado argentino, y cuando crecemos para producir y para exportar les damos un blindaje jurídico que nos genere también credibilidad con los países de la región, y los mercados de exportación que vendrán». Es decir, las ventajas obtenidas por estas concesiones no podrán modificarse hasta la finalización de los respectivos contratos de explotación.
También le garantizó a los inversores en Vaca Muerta la puesta en marcha de «un canal verde» aduanero para acelerar el ingreso de equipos, maquinaria y otros productos aplicados a la actividad del sector. Advirtió el ministro, al mismo tiempo, «que el estado dé ventajas no significa que sea bobo: hoy también hemos decidido desde la Aduana denunciar a una empresa proveedora de servicios (al sector petrolero) por sobrefacturación de importaciones con triangulación».
«Hemos armado un cupo especial de 30 mil millones de pesos en créditos para intensificar la inversión de todo el complejo pyme a los efectos de garantizar la capacidad de prestar servicios a cada una de las grandes empresas productoras de gas y de petróleo de la Patagonia argentina», incluyó en su presentación.
Anunció, además, la puesta en marcha de las obras para duplicar la capacidad de transporte del Oleoducto del Valle (Oldelval), que lleva el petróleo de Vaca Muerta a Bahía Blanca. En esta obra, está comprometida una inversión privada de 1400 millones de dólares.
También hizo mención de la firma, en el día de ayer, del contrato para la reactivación del Proyecto Fénix, un desarrollo offshore frente a las costas de Tierra del Fuego, con una inversión de u$s 700 millones, en el que intervienen Total, Pan American Energy y Wintershall. «Necesitamos no uno, sino cientos de esos proyectos», enunció Massa.
En la híperactividad que desplegó el ministro en materia de hidrocarburos también involucró a su par de Interior, Eduardo Wado De Pedro, con quien dijo que avanzará «en el desarrollo de un equipo que trabaje el tema hidrocarburos como política de Estado».
NACIONALES
A qué juega Massa: Movidas audaces pero sin patear el tablero

La reacción del FMI, las corporaciones y la población más vulnerable al conjunto de las medidas económicas tomadas en las últimas semanas por Sergio Massa. El impacto de la eliminación de Ganancias para los trabajadores y la devolución del IVA.

Si el resultado de las elecciones pasara principalmente por la economía, ¿quién va a definir estas elecciones? ¿El estado de ánimo de la población o las propuestas de los candidatos? ¿Importan o se perciben las diferencias entre las propuestas económicas? ¿O predomina el voto «enojo y castigo» por sobre la evaluación de esas diferencias?. Además, ¿cómo juega el factor externo, el poder económico global, en la pelea? ¿Qué incidencia tiene el FMI, o el gobierno de Estados Unidos, en el voto? Dicho de otro modo: ¿por quién vota el FMI?
Sin que la pretensión de este cronista sea la de responder a todos esos interrogantes –diría nuestro «por siempre» inolvidable Mario Wainfeld–, se podría asegurar que diversas acciones de diferentes actores en los últimos días, conllevan la intención de responder a varias de esas preguntas a la vez. Tomemos tres momentos de esa secuencia. La conferencia de prensa de la portavoz del FMI del jueves. La reunión virtual del Consejo del Salario del miércoles. El resumen que hace Sergio Massa del conjunto de medidas adoptadas con posterioridad a la devaluación del 14 de agosto, en cualquiera de sus últimas presentaciones.
Las expresiones de Julie Kozack, vocera del FMI, del jueves con respecto a la situación argentina valen tanto por lo que dijo como por lo que sugirió sin decir. Veamos. «La situación económica actual sigue siendo muy desafiante y compleja. La inflación es muy alta y está subiendo. Los activos de las reservas internacionales son bajos. Las condiciones sociales son frágiles». Esta síntesis del cuadro, arrojado sobre la mesa no como un informe que llevó por escrito, sino en respuesta a preguntas de los periodistas, no tienen evidentemente la intención de llevar calma y sugerir que los problemas se están resolviendo, sino que está poniendo de manifiesto crudamente la gravedad de la situación.
Vayamos a cómo siguió su relato, cuando le preguntaron específicamente por las últimas medidas tomadas por el gobierno argentino, todas con clara orientación de provocar transferencias de ingresos a favor de los sectores medios y bajos, a costa en su mayoría de las arcas fiscales.
«Las medidas políticas y los anuncios adoptados recientemente se suman a los desafíos de Argentina. El paquete de medidas que se tomaron, acordado con el Fondo en el contexto de las recientes revisiones, tenía la intención de salvaguardar la estabilidad y reconstruir las reservas. Estamos trabajando en entender mejor el impacto y la necesidad de medidas de compensación».
Lo dicho por la portavoz del Fondo sugiere que el organismo no desconocía las medidas que iba a tomar Massa tras recibir, el 23 de agosto, el desembolso de 7500 millones de dólares. Esas medidas, que empezó a anunciar el domingo 27, buscaban compensar los efectos de la devaluación del 14 de agosto, un día después de las PASO.
Al FMI no le gustan esas medidas de transferencias que aumentan los gastos del gobierno. Pero a Massa tampoco le gustó que le impusieran la devaluación ni le reconoce méritos al salto cambiario. «Si algo mejoramos en la balanza en las últimas semanas, fue por la extensión del impuesto PAIS a la importación de ciertos bienes y servicios, que frenó parte de los pagos al exterior por operaciones especulativas. La devaluación no nos dejó nada en divisas, y en cambio nos provocó un shock inflacionario y deterioro de los ingresos de la población«, señala el ministro candidato en reuniones con allegados.
Hasta aquí, este es el choque más evidente entre el FMI y el gobierno desde que se aprobó el acuerdo de facilidades extendidas, en marzo de 2022. Pero no significa un alejamiento o ruptura, necesariamente. Si no, detengámonos en lo que dijo Kozack al ser consultada sobre una eventual sustitución del peso por el dólar en la economía argentina:
«Determinar la tasa de cambio es prerrogativa de cada país soberano. Lo que al organismo (FMI) le preocupa de una dolarización es que se pueda asegurar que las políticas macroeconómicas son consistentes con una transición ordenada. Una dolarización total requiere de importantes pasos preparatorios, y tampoco es un sustituto de las buenas políticas macroeconómicas».
De lo que se deduce que la funcionaria, una estrecha allegada a Kristalina Georgieva, le «bajó el precio» a la dolarización: no considera que sea el remedio mágico para alcanzar la estabilidad monetaria y fiscal –que es la verdad revelada en la religión de Javier Milei– ni parece avalar que estén dadas las condiciones para semejante ensayo.
Si bien Massa tiene razones para interpretar que el FMI le dio la espalda cuando más apoyo necesitaba en divisas, hay que comprender que este organismo dejó aun más huérfano el experimento de la dolarización que Milei vende como poción mágica.
En el plano interno, varios de los participantes de la reunión del consejo del salario del miércoles, que definió un aumento del mínimo del 32 por ciento para el último trimestre del año, coincidieron en destacar la actitud de «prudencia» de la representación empresaria, en la que siempre se destaca el rol de la UIA. La reunión fue corta, expeditiva. Hubo un rápido acuerdo para definir un aumento «moderado» frente a una inflación mensual que todavía sigue arriba del 10 por ciento, sin expresiones discordantes de la UIA. «Se cuidaron mucho de no quedar como los que patean el tablero en una situación de emergencia; hay mucha sensibilidad por el clima electoral», confió una muy alta fuente. ¿Prudencia o realineamiento?
En cuanto a la propia mirada del gobierno sobre las medidas, hay una conclusión que es unánime: la derogación del impuesto a las ganancias para la cuarta categoría (trabajadores en relación de dependencia) y la devolución del IVA sobre compra de productos de la canasta familiar han sido las más impactantes. «Cambiaron el ánimo en el ambiente laboral», sostienen dirigentes sindicales de los que recorren fábricas permanentemente.
Hay un error de perspectiva en quienes sostienen que eliminar Ganancias «apenas» favorece a un puñado de asalariados de altos ingresos. Quienes vienen detrás, con salarios medios o medio/altos, que pagaron Ganancias en el pasado, saben que un simple retraso de seis meses en la actualización del «piso», frente a una inflación elevada, los mete de nuevo en el terreno de los que pagan. Solo la ley que deroga la cuarta categoría le brinda la tranquilidad de que no volverán a estar alcanzados.
Por último, la devolución del IVA tuvo el enorme mérito, que pocas políticas públicas logran, de su masividad. Al trabajador informal, de bajos ingresos, que se maneja con tarjeta (no son todos, pero es una buena proporción), la medida le llega y lo percibe. Quienes trabajan permanentemente en esa franja de la población, señalan que se notó el impacto.
En una elección en la que la economía define, el ministro y candidato Massa retomó la iniciativa, mueve el tablero y hasta los factores de poder internos y externos se acomodaron en función de esas iniciativas. Con una oposición casi congelada, jugó una carta más, y de las pesadas: un gobierno de unidad nacional, que incluya a parte de una oposición que podría desmembrarse después de la primera vuelta. Una imagen que no cae nada mal allá, por el Norte, cuyo embajador incluso se anticipó a ofrecer su apoyo si los «moderados» de las dos fuerzas que en ese momento se mostraban en pugna, se juntaban. La «gobernabilidad» los prefiere moderados.
-
RIO TURBIO2 días atrás
La Orquesta PuKará de Río Turbio es anfitriona del Encuentro Musical MOLPA 2023
-
28 DE NOVIEMBRE2 días atrás
La Selección de Afusa camino a Posadas
-
RIO TURBIO2 días atrás
Río Turbio estuvo en el Nacional Evita de MTB
-
PROVINCIALES2 días atrás
Roxana Puebla y Eugenia De San Pedro presentaron su proyecto de gestión 2023-2027