PROVINCIALES
Educación dio inicio al Ciclo Lectivo 2023 en El Chaltén

El Gobierno de Santa Cruz, a través del Consejo Provincial de Educación, llevó adelante el acto oficial que dio comienzo al Ciclo Lectivo 2023, correspondiente al período especial que comprende la localidad de El Chaltén.

Estuvieron presentes en el acto realizado en las instalaciones de la EPP N°59, “Los Notros”, la directora Provincial de Educación Primaria, Olga Rizzi; el director Provincial de Educación Secundaria, Nelson Zalazar y la directora de Educación Especial, Yeny Bernal. Además, asistieron equipos directivos, docentes, estudiantes y familias.
Consultada sobre el inicio lectivo, Olga Rizzi, señaló que “se desarrolló con total normalidad y con gran convocatoria, con la diferenciación que este año en la escuela de El Chaltén, tendrá la jornada extendida de una hora, como en el resto de todas las instituciones educativas de la provincia”.
En ese sentido, indicó que “la extensión mayor de la jornada se desarrolló en el turno tarde y turno mañana, con mucha alegría por parte de los chicos, dado el reencuentro, el momento del primer día de clase que tiene todo un simbolismo para cualquiera de nosotros y especialmente para los estudiantes”.
Por su parte, Zalazar expresó que “comenzaron las clases con el primer año completo, donde se hizo una jornada de iniciación destinada a los ingresantes” y, a su vez, comentó que “se trabajó sobre acuerdos básicos, como el de convivencia, de normativa de secundaria, las características de los espacios curriculares y las formas de evaluación”.
Cabe destacar que, la Escuela Provincial Primaria, “Los Notros”, cuenta con una matrícula de doscientos cincuenta y ocho estudiantes, donde además se brinda educación en la Modalidad de Adultos.
La comunidad educativa acompañó el ingreso de 34 estudiantes al primer ciclo lectivo y, también, de niños y niñas, de Sala de 3 años al jardín de infantes.
Para concluir, Rizzi destacó que el día de hoy se pudo dar inicio sin ninguna complicación al ciclo lectivo en El Chaltén, y han podido tener el listado para la localidad como corresponde por parte de la Junta de Clasificación
PROVINCIALES
“El amor, la paz y el servicio nacen en casa, desde mi Cañadón Seco”, el testimonio de Magdalena Zurita

Magdalena Zurita, una joven santacruceña oriunda de Cañadón Seco, quien peregrinó varios kilómetros y llegó a encontrarse con el papa Francisco en el Vaticano, experiencia que la marcó profundamente y hoy sigue ese camino por la solidaridad, el amor por el otro.

Tras el fallecimiento del Papa, Magdalena expresó su dolor, pero también su compromiso con continuar su legado de humildad, ternura y justicia social. “Francisco fue un maestro que nos enseñó que el cambio empieza en nuestro metro cuadrado”, afirmó en diálogo con la subsecretaría de Producción y Contenidos.
Llegó al Vaticano
Magdalena Zurita conoció el mensaje del Papa Francisco a través de su trabajo voluntario en la Villa 31 junto al padre Guillermo Torre, parte del movimiento de curas villeros que el propio Francisco impulsó. Allí vivió en carne propia la «Iglesia pobre entre los pobres», donde descubrió una riqueza humana basada en la solidaridad, la humildad y el amor. Esa experiencia la marcó profundamente y la inspiró a seguir un camino de compromiso social y espiritual.
Luego de estudiar una maestría en Estudios de Paz en Japón, decidió hacer una peregrinación por Italia como forma de introspección y reencuentro personal, su camino fue recorrer 1000 kilómetros. Al llegar a Roma, gracias al padre Guillermo, asistió a una misa privada del Papa Francisco en Santa Marta, donde pudo saludarlo personalmente. Ese encuentro fue profundamente conmovedor y confirmó en ella la figura de Francisco como un líder espiritual y humano que trascendía lo religioso, admirado incluso en ámbitos académicos internacionales por su mensaje ambiental, social y de justicia.
Cañadón Seco
Ella es reconocida por su compromiso social y pastoral, nos compartió el origen de su vocación de servicio: una infancia atravesada por valores de igualdad, espiritualidad y comunidad, vividos intensamente en su Cañadón Seco natal. “Para mí era como una utopía”, dice al recordar su niñez en ese pequeño pueblo santacruceño. “En la escuela pública iba desde el hijo del ingeniero hasta el policía del pueblo… jugábamos todos, no importaba de dónde venías. Yo siempre rescato ese valor de igualdad”.
Desde muy joven, su formación estuvo marcada por la experiencia en la parroquia local y la acción comunitaria: “Mi madre era catequista y siempre estuvo en la iglesia. Desde chiquita viví la catequesis como algo muy bonito, donde llevábamos los mensajes de Jesús a casa y hacíamos acciones concretas como Él”. A ello se sumó la participación en grupos scouts, misiones y tareas solidarias en distintos lugares de la Patagonia, donde el frío y la pobreza eran parte del escenario cotidiano: “Acompañábamos a adultos mayores que vivían en casas de chapa, en los cerros. Fue muy duro, pero también muy formativo”.
Zurita reconoce que su vocación también se nutrió del ejemplo familiar y de un compromiso político y social presente en su entorno: “Mi papá siempre estuvo involucrado en política, en lo sindical, con una mirada de justicia social. Eso me marcó mucho: entender que hay un otro, que hay una sociedad que merece vivir en paz y con derechos”.
Inspiración de rol espiritual
Con el tiempo, ese impulso inicial se transformó en una misión más profunda, que hoy mantiene con su trabajo voluntario en la Villa 31, en Buenos Aires y resume en un mensaje claro: la necesidad de construir paz.
Inspirada por el Papa Francisco, remarca que esa paz y ese amor deben expresarse con coraje: “A veces hay que hacer lío, como decía Francisco. Pero siempre en el marco de la paz, del amor. Es una mezcla de ternura, coraje y fortaleza”.
Y sobre el rol de la espiritualidad, concluye: “Reconectar con Cristo desde una parroquia, desde la casa, rezando… eso nos da luz. Somos comunidad, no estamos solos. Y el trabajo comunitario empieza en casa, en cómo tratamos a nuestros hijos, a nuestros animales, a nosotros mismos”.
Finalmente, reivindica la humanidad como espacio de encuentro y comprensión mutua: “Todos tenemos nuestras sombras. Y eso nos hace fuertes, porque nos permite entender el dolor del otro”.
“Nunca dejemos de trabajar en comunidad, a mi Cañadón Seco lo atesoro en mi corazón porque marcó mi camino”.
-
RIO TURBIO8 horas atrás
Sismo de 5.2 en la escala de Richter en Rio Turbio
-
RIO TURBIO2 días atrás
Fuertes vientos en Rio Turbio, lo que ocasiono la caída de un árbol
-
RIO TURBIO17 horas atrás
Detienen en la Triple Frontera a una persona que era buscado por la justicia en Rio Turbio
-
PROVINCIALES1 día atrás
“El amor, la paz y el servicio nacen en casa, desde mi Cañadón Seco”, el testimonio de Magdalena Zurita