Conectarse con nosotros

NACIONALES

Desde el FdT apuntan a Milman por un posible vínculo con el ataque a Cristina

Publicado

el


El ministro del Interior, Eduardo «Wado» de Pedro, el senador Leopoldo Moreau y el diputado Rodolfo Tailhade consideraron de extrema gravedad que el legislador opositor haya tenido conocimiento del hecho, como se investiga, y aseguraron que debería ser citado a declarar.

La justicia federal investiga si el diputado de Juntos por el Cambio Gerardo Milman sabía que la noche del 1 de septiembre la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner sería víctima de un intento de magnicidio y si dijo que cuando ocurriera el hecho, él estaría «camino a la costa», informaron fuentes con acceso a la investigación judicial.

El diputado nacional por el Frente de Todos (FdT) y presidente de la Comisión Bicameral de Inteligencia, Leopoldo Moreau, consideró que «es una cuestión delicada» la investigación que se sigue en la Justicia Federal para corroborar si el legislador de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman tenía conocimiento de que iba a perpetrarse un atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

Por su parte, el diputado nacional Rodolfo Tailhade aseguró que la jueza federal María Eugenia Capuchetti «ya debería haber citado» al diputado de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman, sospechado de tener conocimiento del atentado antes de que ocurriera.

Y el ministro de Interior, Eduardo “Wado” De Pedro, calificó como «grave” el testimonio de un empleado del Congreso que contó en la Justicia que el diputado de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman tenía conocimiento sobre que se preparaba un atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

La pista que se investiga

La pista se investiga en un legajo reservado que se abrió a partir del testimonio de un asesor del Frente de Todos en la Cámara de Diputados, quien aseguró haber escuchado a Milman hacer referencia al ataque antes de que ocurriera.

El testigo, cuya identidad se mantendrá bajo reserva, aseguró ante la justicia que el episodio ocurrió el 30 de agosto en el restorán Casablanca, ubicado a metros del Congreso, después de las 15.20, según pudo reconstruir Télam.

El testigo aseguró haber escuchado que el diputado Gerardo Milman, de JxC, le decía a dos mujeres con las que compartía mesa que «cuando la maten» él iba a estar «camino a la costa»; algo que volvió a su mente dos días después cuando se enteró del intento de magnicidio.

Repercusiones en el Frente de Todos

El diputado nacional por el Frente de Todos (FdT) y presidente de la Comisión Bicameral de Inteligencia, Leopoldo Moreau, consideró que «es una cuestión delicada» la investigación que se sigue en la Justicia Federal para corroborar si el legislador de Juntos por el Cambio (JxC) Gerardo Milman tenía conocimiento de que iba a perpetrarse un atentado contra la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner.

«En los bordes de JxC y el PRO aparecen elementos llamativos. La posibilidad de que haya estado involucrado el diputado (Milman) es una cuestión delicada. En la investigación, la pista tiene que ser tratada con mucho cuidado«, sostuvo Moreau en declaraciones para AM750.

Moreau aseguró que «la Justicia está dando pasos para avanzar en la causa» y «arrojar luz sobre aspectos centrales vinculados» al atentado contra la Vicepresidenta.

Foto Archivo
Foto: Archivo.

Por otra parte, Moreau sostuvo que la clave de la causa que se sigue por el atentado contra la Vicepresidenta, que está a cargo de la jueza María Eugenia Capuchetti, está vinculada con la investigación que tiene a cargo el magistrado Marcelo Martínez de Giorgi sobre el grupo Revolución Federal y sus posibles implicaciones con el hecho ocurrido el pasado 1 de septiembre.

«Naturalmente la clave es el financiamiento de Revolución Federal. En ese sentido, en la causa se ha avanzado mucho para encontrar fuentes de recursos que parecían débiles pero se han ido fortaleciendo», opinó.

Asimismo, expresó que el descubrimiento del dinero proveniente del grupo de empresas de la familia del exministro de Finanzas de Cambiemos Luis Caputo destinado a Revolución Federal «da una magnitud diferente a la investigación».

Para el diputado, los vínculos aparentes entre Revolución Federal y el ataque a la vicepresidenta hace que «nos acerquemos a la recalificación de las causas».

«Mantener la causa como un intento de homicidio es absurdo, creo que estamos ante un hecho de terrorismo. Es un hecho institucional, hay que recalificar la investigación. Todo tiende a unificar las causas», concluyó.

Por su parte, el diputado Rodolfo Tailhade dijo que la jueza «ya debería haber citado a Milman» en la causa del intento de magnicidio

«A esta altura la jueza ya debería haber citado a Milman. Es un diputado de la nación, no cualquier persona. No se puede estar dando vueltas alrededor de un tema tan serio. Si tiene miedo que lo llamen como testigo, pero no puede pasar tanto tiempo«, señaló Tailhade en diálogo con la radio AM 990.

«La jueza tomó medidas porque ratificó la reunión de Milman con estas dos mujeres y todo lo que dijo el testigo que había pasado, aparentemente ya lo tiene demostrado», sostuvo Tailhade.

En ese marco, el legislador del FdT y titular de la comisión de Justicia de la Cámara baja advirtió que hasta ahora hubo «una respuesta muy lenta y pasiva» por parte de la jueza Capuchetti ya que el testimonio «tiene varios días».

Tailhade destac los vnculos de Milman con la presidenta del PRO Patricia Bullrich con quien trabaj en seguridad durante el gobierno de Macri
Tailhade destacó los vínculos de Milman con la presidenta del PRO, Patricia Bullrich, con quien trabajó en seguridad durante el gobierno de Macri.

Además, recordó que Milman «no solo fue jefe de gabinete» de la exministra de Seguridad Patricia Bullrich durante la gestión de Cambiemos sino que también «estaba a cargo de la inteligencia criminal», desde donde se hicieron «muchas operaciones del estilo espionaje ilegal macrista».

«También tengo el dato que las dos mujeres que estaban con Milman trabajaban en inteligencia criminal en el ministerio de Seguridad», agregó en referencia a Carolina Gómez Mónaco e Ivana Bohdziewicz, las dos mujeres que en la tarde del 30 de agosto compartieron la mesa con Milman en el restorán Casablanca.

Por otra parte, Tailhade criticó que la causa que investiga a la organización de ultraderecha Revolución Federal no este unificada con la del atentado a Cristina Fernández de Kirchner y atribuyó esa decisión procesal a una «estrategia de Comodoro Py» para que «no haya resultados en ninguna» de las investigaciones.

En cuanto al posible financiamiento a Revolución Federal por parte de un fideicomiso de la sociedad Caputo Hermanos, el diputado advirtió que «no hay nada que cierre alrededor» de ese grupo empresarial ya que -insistió- «no hay explicaciones razonables» sobre la contratación de la carpintería de Jonathan Morel para unas obras de construcción en Neuquén.

En esa línea, el legislador del FdT remarcó que el grupo que organizó la Marcha de Antorchas contra la Casa Rosada y que llevaba guillotinas en las protestas opositoras «estaba evidentemente muy bien financiado».

«Las explicaciones, de momento, a mí no me cerraron. Cómo llegan a la carpintería del (portavoz de Revolución Federal Jonathan) Morel una empresa constructora del nivel de Caputo cuando no tenía ni un cartel que lo identificara», profundizó.

Y agregó que desde la sociedad de Caputo Hermanos hubo «especulación» para tratar de mantenerse ajenos a la investigación y que solo se presentaron ante el juzgado cuando «se enteraron que era inevitable».

«Es una cosa detrás de la otra. Uno no quiere pensar mal pero está demasiado explícito», concluyó.

Finalmente, el ministro del Interior Eduardo «Wado» De Pedro calificó como «grave» el testimonio que vincula a Milman con el atentado contra Cristina

No nos imaginábamos que la violencia política podía volver a Argentina. Es muy serio y muy grave la denuncia que dice que un diputado como (Gerardo) Milman tenía conocimiento de este hecho”, señaló De Pedro en declaraciones a El Destape Radio.


NACIONALES

El futuro de la energía atómica: renuncias, desfinanciamiento y deudas millonarias

Publicado

el


La CNEA tiene parados sus proyectos principales y acumula deudas millonarias. Los despidos ya llegan a 570. Paro y protestas de la Uocra. La voz de la presidenta saliente, Adriana Serquis.

Pablo Esteban

Por Pablo Esteban

En medio del brutal ajuste en el sector nuclear, el gobierno finalmente aceptó la renuncia que Adriana Serquis había presentado el 10 de diciembre y, mediante un decreto, determinó que Germán Lavalle y Luis Rovere asumieran como presidente y vicepresidente de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA).  La funcionaria saliente había denunciado la falta de fondos para continuar con obras claves como el Carem y el RA-10 –dos reactores nucleares que se construyen desde 2014 y 2016, y que en poco tiempo podían estar listos–, así como también alertó por la acumulación de una deuda millonaria con las compañías subcontratistas que contribuían a la fabricación de las tecnologías. Representa toda una incógnita el futuro de la institución a partir del cambio de timón y el recambio de autoridades, que se produce mientras la motosierra trabaja a pleno: los dos proyectos están paralizados y en torno al Carem los despidos ya están por llegar a los 570, según denunció la Uocra, que mantiene en Zárate una huelga por tiempo indeterminado. Esta semana, hubo marchas y cortes de ruta en esa ciudad en reclamo de la continuidad de los trabajos.  

Más allá de las dudas, Serquis aventura sus propias proyecciones a partir de las conversaciones sostenidas con los nuevos gestores. “Me dijeron que el RA-10 lo van a tratar de sacar adelante sí o sí, porque le falta poquito. La mayor duda está con el Carem, con el que quieren hacer una revisión integral con auditores externos”. Y completa: “Veo difícil que puedan destrabar el conflicto presupuestario, ellos dicen que van a intentar resolverlo. Nosotros les comunicamos la urgencia y la necesidad de fondos para cada uno de los proyectos. La institución a partir de junio no va a poder funcionar, eso está claro”.

La situación de la CNEA, el organismo rector de la energía nuclear en el país, es conflictiva por varios motivos: en los últimos meses contrajo deudas millonarias con los contratistas que trabajan en la puesta en marcha de los reactores (en el caso del Carem, por ejemplo, acumula una suma de 7 mil millones de pesos), despidos de trabajadores implicados en líneas de trabajo que están suspendidas por el momento (principalmente de Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima, una de las principales contratistas) y cerebros que ya se fugan ante la imposibilidad de condiciones de trabajo adecuadas. El gobierno no envía los fondos necesarios y ello sirve como detonante para empujar a la Comisión al borde del abismo.

Finalmente, el presidente Milei le aceptó la renuncia a Serquis y luego de la transición asumieron los nuevos nombres. La doctora en Física y además Investigadora Principal del Conicet lo relata de este modo: “Hace un par de semanas vengo trabajando con esta gente. Me había comprometido a hacer una transición razonable y lo hice. El secretario de Energía me pidió que me pusiera en contacto con Germán Lavalle, que también realizó reuniones con los gerentes de área de nuestra institución. Como vicepresidente lo acompaña Luis Rovere. Ambos son ingenieros nucleares y egresados del Instituto Balseiro”, comenta quien a partir de la semana que viene volverá a estar al frente del Instituto de Nanociencia y nanotecnología del Conicet.

Los que entran y los que salen

Consultada por este diario, Serquis brinda un detalle de la trayectoria de las autoridades designadas. “En los 90’s, Lavalle fue gerente de institucionales en el momento en que la CNEA perdió el control de las centrales nucleares, cuando fueron a parar a Nucleoeléctrica Argentina Sociedad Anónima. En el 2000 se fue de la institución con un retiro voluntario que le ofreció el gobierno de la Alianza”. Lavalle, según cuenta la expresidenta, se autoasume con un perfil “más técnico que político”. A menudo, se utiliza tal caracterización cuando se busca dotar de legitimidad el rol experto en detrimento del ideológico; como si la ciencia y la política podrían pensarse como dos campos autónomos. Rovere, por su parte, es ingeniero nuclear y es gerente del Centro de Medicina Intecnus, una institución sanitaria reconocida en Bariloche. “Las nuevas autoridades tratarán de poner nuevos gerentes de las gestiones anteriores. Por ahora, no vi en carpeta a ninguna mujer en su equipo de trabajo y no tengo idea si sacarán a las que ahora están a cargo. Estoy preocupada, la verdad”.

Lavalle y Rovere reemplazan a Adriana Serquis y a Diego Hurtado, que había presentado su renuncia el 9 de diciembre cuando Alberto Fernández aún era el presidente. Serquis se destacó en su rol por conducir iniciativas relevantes como los reactores nucleares Carem y el RA 10, desarrollos que están en etapas muy avanzadas de diseño y que podrían ser fundamentales para el ingreso de miles de millones de dólares al país si en el futuro inmediato consiguieran finalizarse. Tecnologías que, de hecho, podrían colocar a Argentina a la vanguardia de la energía nuclear.

Asimismo, Serquis tuvo un rol fundamental al democratizar las condiciones de acceso y participación de las mujeres en la gestión de la energía nuclear. También se destacó por un relato muy activo en pos de cambiar la percepción social con respecto a la materia. En cada intervención pública, trató de narrar las ventajas que tiene la energía nuclear en relación a otras energías e intentó desestigmatizar una fuente que históricamente estuvo marcada por desastres como Chernobil y Fukushima. También, sus colegas detallan su énfasis en promover el conocimiento local como vía hacia la soberanía: se forman científicos y científicas en instituciones públicas y luego le devuelven al Estado esta educación de excelencia a través del diseño de tecnologías autóctonas que, en última instancia, permiten el ingreso de divisas al país.

Casi listos, casi paralizados

El Carem es el primer reactor de potencia baja y media, diseñado y desarrollado 100 por ciento en Argentina. Su puesta en marcha podría ser clave para el abastecimiento eléctrico en zonas alejadas de centros urbanos y en parques fabriles, así como también para objetivos diversos que serán cruciales en los próximos años, como la desalinización del agua de mar y la producción de hidrógeno. Por su parte, el RA 10 servirá, entre otras cosas, para abastecer de radioisótopos a todos los centros de medicina nuclear del país; insumos fundamentales para el diagnóstico y el tratamiento de cáncer.

Las aplicaciones en salud, industria, ciencia y tecnología son infinitas para estas dos tecnologías de primer nivel internacional que, según las proyecciones y si el ritmo no se hubiese ralentizado por falta de financiamiento, deberían haber estado listos para 2025 (RA-10) y 2028 (Carem). Para tener referencia, el proyecto Carem ya lleva invertidos 650 millones de dólares y requeriría de una partida de 200 millones más para concluir; cuando un proyecto de la misma envergadura en Estados Unidos cuesta 1400 millones de dólares. En relación a las ganancias que se podrían obtener, la venta de un reactor de la magnitud del Carem podría significar un ingreso de 4 mil millones de dólares; mientras que el RA-10, de ponerse en marcha, podría significar ingresos de 90 millones de dólares al año.

Las potencialidades de ambas iniciativas son innegables. Sin embargo, por el momento, la inercia parece estar frenada hasta nuevo aviso. Para los tiempos que maneja la ciencia ya están casi listos, pero por una decisión política están prácticamente paralizados. 

[email protected]


Seguir leyendo

Más leídas - últimas 48Hs.