La desesperación de un padre por encontrar a su hijo desaparecido lo lleva a realizar esfuerzos más allá de lo esperado, cruzando fronteras y pidiendo ayuda, sin perder la esperanza de volverlo a ver.

Desde la desaparición de su hijo Alejandro Mauricio Herrera el 25 de junio de 2022, Julio Orlando Herrera ha emprendido una búsqueda desesperada en Punta Arenas, Chile, para encontrar a su ser querido. El joven de 28 años abandonó su hogar junto a su pareja ese día y no ha regresado desde entonces, dejando a su familia en la angustia y la incertidumbre.

Julio Orlando Herrera ha demostrado una determinación inquebrantable en su búsqueda, contando con el apoyo de diversas instituciones públicas, fuerzas de seguridad y voluntarios tanto en Chile como en Argentina, donde su hijo trabajaba como mecánico minero en el Yacimiento Carbonífero de Río Turbio.

El padre lleva consigo un set fotográfico con imágenes de su hijo y detalles que podrían ayudar a identificarlo, además de números de contacto para recibir información relevante sobre su paradero. Ha buscado incansablemente, incluso con la ayuda de la Prefectura para rastrear espejos de agua, pero hasta la fecha no ha tenido éxito en su búsqueda.

Alejandro Mauricio Herrera, además de su trabajo como mecánico minero, era DJ y solía tocar en centros nocturnos en Puerto Natales, lo que amplía el área donde podría haberse desplazado.

Julio agradece el apoyo brindado por Carabineros, la PDI y la Fiscalía de Puerto Natales en Chile, y ruega a cualquier persona que tenga información relevante que se comunique al número de emergencia 134 de la Policía de Investigaciones para ayudar a poner fin a la incertidumbre que ha afectado a su familia durante más de un año. Su historia es un ejemplo de la fortaleza de un padre en busca de respuestas sobre su hijo desaparecido.