PROVINCIALES
“El amor, la paz y el servicio nacen en casa, desde mi Cañadón Seco”, el testimonio de Magdalena Zurita

Magdalena Zurita, una joven santacruceña oriunda de Cañadón Seco, quien peregrinó varios kilómetros y llegó a encontrarse con el papa Francisco en el Vaticano, experiencia que la marcó profundamente y hoy sigue ese camino por la solidaridad, el amor por el otro.

Tras el fallecimiento del Papa, Magdalena expresó su dolor, pero también su compromiso con continuar su legado de humildad, ternura y justicia social. “Francisco fue un maestro que nos enseñó que el cambio empieza en nuestro metro cuadrado”, afirmó en diálogo con la subsecretaría de Producción y Contenidos.
Llegó al Vaticano
Magdalena Zurita conoció el mensaje del Papa Francisco a través de su trabajo voluntario en la Villa 31 junto al padre Guillermo Torre, parte del movimiento de curas villeros que el propio Francisco impulsó. Allí vivió en carne propia la «Iglesia pobre entre los pobres», donde descubrió una riqueza humana basada en la solidaridad, la humildad y el amor. Esa experiencia la marcó profundamente y la inspiró a seguir un camino de compromiso social y espiritual.
Luego de estudiar una maestría en Estudios de Paz en Japón, decidió hacer una peregrinación por Italia como forma de introspección y reencuentro personal, su camino fue recorrer 1000 kilómetros. Al llegar a Roma, gracias al padre Guillermo, asistió a una misa privada del Papa Francisco en Santa Marta, donde pudo saludarlo personalmente. Ese encuentro fue profundamente conmovedor y confirmó en ella la figura de Francisco como un líder espiritual y humano que trascendía lo religioso, admirado incluso en ámbitos académicos internacionales por su mensaje ambiental, social y de justicia.
Cañadón Seco
Ella es reconocida por su compromiso social y pastoral, nos compartió el origen de su vocación de servicio: una infancia atravesada por valores de igualdad, espiritualidad y comunidad, vividos intensamente en su Cañadón Seco natal. “Para mí era como una utopía”, dice al recordar su niñez en ese pequeño pueblo santacruceño. “En la escuela pública iba desde el hijo del ingeniero hasta el policía del pueblo… jugábamos todos, no importaba de dónde venías. Yo siempre rescato ese valor de igualdad”.
Desde muy joven, su formación estuvo marcada por la experiencia en la parroquia local y la acción comunitaria: “Mi madre era catequista y siempre estuvo en la iglesia. Desde chiquita viví la catequesis como algo muy bonito, donde llevábamos los mensajes de Jesús a casa y hacíamos acciones concretas como Él”. A ello se sumó la participación en grupos scouts, misiones y tareas solidarias en distintos lugares de la Patagonia, donde el frío y la pobreza eran parte del escenario cotidiano: “Acompañábamos a adultos mayores que vivían en casas de chapa, en los cerros. Fue muy duro, pero también muy formativo”.
Zurita reconoce que su vocación también se nutrió del ejemplo familiar y de un compromiso político y social presente en su entorno: “Mi papá siempre estuvo involucrado en política, en lo sindical, con una mirada de justicia social. Eso me marcó mucho: entender que hay un otro, que hay una sociedad que merece vivir en paz y con derechos”.
Inspiración de rol espiritual
Con el tiempo, ese impulso inicial se transformó en una misión más profunda, que hoy mantiene con su trabajo voluntario en la Villa 31, en Buenos Aires y resume en un mensaje claro: la necesidad de construir paz.
Inspirada por el Papa Francisco, remarca que esa paz y ese amor deben expresarse con coraje: “A veces hay que hacer lío, como decía Francisco. Pero siempre en el marco de la paz, del amor. Es una mezcla de ternura, coraje y fortaleza”.
Y sobre el rol de la espiritualidad, concluye: “Reconectar con Cristo desde una parroquia, desde la casa, rezando… eso nos da luz. Somos comunidad, no estamos solos. Y el trabajo comunitario empieza en casa, en cómo tratamos a nuestros hijos, a nuestros animales, a nosotros mismos”.
Finalmente, reivindica la humanidad como espacio de encuentro y comprensión mutua: “Todos tenemos nuestras sombras. Y eso nos hace fuertes, porque nos permite entender el dolor del otro”.
“Nunca dejemos de trabajar en comunidad, a mi Cañadón Seco lo atesoro en mi corazón porque marcó mi camino”.
PROVINCIALES
«En estos tiempos hay que construir de forma colectiva»

La Rectora de la UNPA, Roxana Puebla, participó de la apertura de la Diplomatura Superior en Docencia Universitaria, que la casa de altos estudios dicta a docentes de todo el país en el marco de un convenio con CONADU Histórica y ADIUNPA y reparó en la necesidad de “no dejar que el Gobierno Nacional haga que resalten los individualismos”
La Rectora de la Universidad Nacional de la Patagonia Austral, Prof. Roxana Puebla, participó el sábado último en el acto de apertura de la Diplomatura Superior en Docencia Universitaria, que nuestra casa de altos estudios comenzó a dictar a más de 240 profesores/as y auxiliares de todo el país en el marco del convenio que la casa de altos estudios firmó en marzo con la CONADU Histórica y ADIUNPA .
El lanzamiento se llevó a cabo a través de la virtualidad y contó con la participación de la Rectora de la UNPA, Prof. Roxana Puebla; la secretaria general de CONADU H, Prof. Francisca Staiti; el Secretario Adjunto, Prof. Oscar Vallejos y la Secretaria General de ADIUNPA, Prof. Karina Dodman, entre otras autoridades de estas instituciones. La grabación se encuentra disponible en https://www.youtube.com/@posgradounpa644
En este contexto, Puebla indicó que la Diplomatura “es el comienzo de un trayecto formativo que seguramente nos va a encontrar trabajando en la especialización”, en alusión a los tramos previstos en el convenio para dar continuidad a la formación de postgrado de los/as docentes.
“Es un gran paso poder estar hoy dictando desde nuestra universidad y con la CONADU Histórica y ADIUNPA la diplomatura en docencia universitaria, no ya solo para nuestra universidad, sino para todos los afiliados y afiliadas a la esta federación en el sistema universitario nacional”, acotó la Rectora.
Durante su intervención en la videoconferencia sostuvo que “en estos momentos que viven las universidades públicas, diferentes sectores de la sociedad y el sistema científico- tecnológico, en el que estamos todos tratando de mantenernos en pie y seguir trabajando colectivamente, es para celebrar porque este convenio muestra una construcción con el gremio de base y también con CONADU Histórica”.
“Esta construcción hoy debemos resaltarla fuertemente y fortalecerla para no dejar que el Gobierno Nacional haga que resalten los individualismos y que no podamos construir en conjunto cuestiones que tienen que ver con el crecimiento de nuestra universidad y con apostar a la formación de la docencia universitaria”, agregó.
Asimismo, remarcó que “en este contexto de tanta incertidumbre, en el que el sistema universitario está luchando por un presupuesto y también por salarios dignos para todos los trabajadores y trabajadoras de las comunidad universitaria, por mejorar las becas para el estudiantado, por apoyar y fortalecer al sistema científico tecnológico; en estos tiempos hay que construir de forma colectiva, de la misma manera que en la primera marcha que hicimos todo el sistema universitario el año pasado, donde tuvimos el acompañamiento de toda la ciudadanía de Argentina”.
Seguidamente, Puebla llamó a “fortalecer lazos para poder seguir en la lucha, en conjunto, no solo con el sistema universitario, sino con todos aquellos grupos que hoy están vulnerados en sus derechos”.
Por último, destacó “toda la construcción y todo el trabajo que ha hecho el sindicato de base, en conjunto con la CONADU Histórica para poder concretar esta formación tan importante” y realizó un reconocimiento “para toda la docencia universitaria, que está formándose para mejorar y aportar a la calidad de la vida universitaria”.
El convenio UNPA- CONADU H- ADIUNPA no solo da alcance nacional a una propuesta surgida de la paritaria particular de nuestra universidad, sino que incluye el compromiso de trabajar en el diseño de una Especialización en Docencia Universitaria para ser presentada ante la CONEAU.
La propuesta formará parte del proyecto de Postgrado que la UNPA desarrolla en el marco de un programa de cooperación académica con ADIUNPA. Los cursos y seminarios de la Diplomatura serán dictados de manera virtual a través del Programa de Educación a Distancia de la UNPA.
La Diplomatura tiene una duración de 12 meses – con una carga horaria mínima de 270 horas- y está dirigida a profesionales, docentes y/o investigadores de cualquier especialidad, con titulación de pregrado o grado universitario o título de institución de educación superior, que posean interés destacado en la temática.