INFO. GENERAL
La UCR se fracturó, pero antes se tuvo que doblar

Tras una larga negociación, el bloque de diputados de la UCR terminó por dividirse. Unos 12 legisladores de Manes-Lousteau dejaron la bancada. De Loredo ahora comanda a 21 diputados.

Primero fueron gritos y reproches. Luego un portazo. El bloque radical finalmente se rompió: 12 diputados que responden a Facundo Manes y Martín Lousteau dejaron el bloque luego de que el jefe de bloque Rodrigo de Loredo se negó a expulsar a los cinco radicales libertarios. Todo ocurrió tras una reunión de bloque en la queDe Loredo abortó a último momento la intención de hacerle firmar a los radicales «con Peluca» un compromiso de votar con el partido y, en su lugar, propuso una mesa de diálogo con los díscolos. Ante esto, desde sector de Manes y Lousteau elaboraron una lista de reclamos, que incluía redistribuir las autoridades del bloque y los lugares en las comisiones. Pero ni llegaron a discutirla porque la supuesta mesa de diálogo naufragó a minutos de empezar y se convirtió en la negociación más corta de la historia. Salieron de allí sin resolver nada y horas más tarde anunciaron que se iban del bloque.
La semana pasada, De Loredo había logrado frenar el reclamo de expulsión que le hicieron los sectores de Manes y Lousteau. Para esto, se subió una idea que vino de otro sector que estaba furioso, el de Julio Cobos y Mario Barletta. Lo que propusieron es que los cinco radicales que habían dado vuelta su voto para apoyar a Milei en contra de los jubilados y las universidades firmaran un compromiso de que, de ahora en más, iban a acatar las normas del bloque e iban a votar lo que resolviera la mayoría.
De Loredo tuvo un encuentro con los cinco, que se mostraron dispuestos a firmar eso «siempre que las iniciativas no pusieran en riesgo el equilibrio fiscal». Con esa pequeña cláusula, quedaba claro que seguirían votando con Milei, pero todos hacían como que habían llegado a una solución. Como dijo alguna vez De Loredo, «fingir demencia y seguir para adelante».
La firma que no fue
El martes hubo una reunión de bloque con el objetivo de firmar ese compromiso, a la que ya el sector de Manes y Lousteau decidió no asistir: sus diputados se juntaron aparte y tuvieron su propio encuentro, en el que discutieron sobre el ultimátum que le habían dado a De Loredo. Esperaban a ver cuantos de los cinco radicales libertarios firmaban el compromiso de De Loredo. Terminó la reunión y ninguno de los cinco había firmado nada. ¿Qué pasó?
En la reunión, consideraron que los de Manes iban a agarrarse de ese compromiso para, en la primera oportunidad de cambio, anunciar que se había incumplido y que había que expulsar a los diputados. Así que, en el encuentro en el que iban a firmar ese pacto, cambiaron de idea a último momento y nadie tuvo que firmar nada. En cambio, propusieron armar una «mesa de diálogo» con el sector de Manes y Lousteau para evitar la ruptura del bloque.
Hubo comunicaciones entre ambos sectores y finalmente se acordó un encuentro de esa mesa de diálogo para el miércoles al mediodía. Ante este nuevo escenario, los rebeldes dejaron trascender su pliego de condiciones a última hora del martes, que incluía:
* La expulsión de los radicales libertarios (de hecho, están esperando que el partido los desafilie para sumar otro argumento).
* Comenzar a discutir una «reorganización del bloque». Entre otras cosas, reclamaron que De Loredo les ceda la secretaría parlamentaria y quieren volver a discutir los lugares en las comisiones. «Se las repartieron entre el grupo de De Loredo y Alfredo Cornejo, sin ningún tipo de respeto por los equilibrios internos», dijeron, como adelantó este diario.
Para el sector de De Loredo este pliego de condiciones hizo que la mesa de diálogo naciera muerta. «Supuestamente la discusión era por grandes principios, y a la hora de los bifes era por los cargos en el bloque», se enojaron cerca de De Loredo.
La mesa de no diálogo
Y llegó la hora de la mesa de diálogo el miércoles al mediodía que arrancó con todos los reproches imaginables. El sector de rebeldes ni llegó a plantear sus reclamos, todo naufragó mucho antes. Fue tan breve el encuentro que no había pasado ni media hora de su comienzo y este diario ya había recibido un mensaje lapidario de los negociadores: «Fracasó la mesa de conciliación». Fueron las negociaciones más cortas que se haya visto.
Para sumar al ridiculo, lo primero en que no pudieron ponerse de acuerdo es en donde iba a ser esa mesa de diálogo. De Loredo propuso su despacho. Cobos y Barletta no quisieron que fuera ahí. Entonces, propusieron juntarse en el quinto piso del anexo de Diputados, en «terreno neutral», pero a De Loredo le pareció mal, y mandó en su lugar a Karina Banfi (su segunda). Por el sector de Lousteau, fue Danya Tavela y por el de Manes, Jorge Rizzoti.
La diputada mendocina Pamela Verasay, quien también fue por el sector de De Loredo, abrió el encuentro diciendo que no pensaban discutir allí la asistencia de los radicales «con Peluca» a la Casa Rosada, que estaba a punto de ocurrir. Se trata de un dato no menor: los cinco mandaron un representante a las reuniones de coordinación que hace su gobierno con aliados, lo que marca que entraron dentro del grupo paraoficialista que sostiene los proyectos y vetos oficiales.

Esto desató una discusión con los sectores rebeldes, que incluyó gritos y algún que otro insulto, según los concurrentes. En el medio, Barletta y Cobos dijeron que los estaban usando al llamarlos a esa reunión, porque no iba a haber ningún diálogo real para resolver los problemas del bloque. Finalmente, la reunión terminó mal y sin soluciones.
«Ya está roto, pero no por la mesa de diálogo. Estaba roto de antes. Van a usar la excusa de la foto en la Rosada para anunciar un quiebre que ya es un hecho. Quieren ensuciar de esta forma de De Loredo«, afirmaban tras la fallida negociación desde el sector del jefe de bloque.
Ruptura
Y finalmente llegó el anuncio. Fueron al final 12 los diputados que decidieron dejar el bloque en desacuerdo con la complacencia ante las votaciones de los radicales libertarios, que dejaron expuesto al partido a críticas por su posición contradictoria sobre jubilados y universidades. Los que se fueron son Facundo Manes, Fernando Carbajal, Pablo Juliano, Carla Carrizo, Mariela Coletta, Manuel Aguirre, Marcela Antola, Marcela Coli, Melina Giorgi, Juan Carlos Polini, Jorge Rizzoti y Danya Tavela. Es decir, la totalidad del sector Manes-Lousteau.
Se tomaron un tiempo más para definir el nombre del bloque, dado que había quienes querían disputar el nombre de UCR y no dejárselo al sector acuerdista.
INFO. GENERAL
Alerta máxima en el kirchnerismo: creen que es inminente la detención de Cristina

En el Instituto Patria creen que la Corte fallará el próximo martes y se declaran en «alerta y movilización».
El senador Oscar Parrilli llamó por teléfono a el diputado Eduardo Valdés este viernes para comunicar el estado de alerta que vive por estas horas el Instituto Patria, bajo la convicción de que la Corte fallará contra Cristina Kirchner en la causa Vialidad el martes próximo, en la reunión de acuerdos. La ex Presidenta y su entorno creen que su detención sería inminente.
La preocupación del kirchnerismo se palpa en los frenéticos mensajes que cruzan legisladores, dirigentes y militantes, tan solo para compartir la angustia ante una decisión que imaginan inminente, luego que la Corte removiera el ultimo obstáculo procesal al rechazar la recusación contra el juez Ricardo Lorenzetti. En el Instituto Patria confirmaron a LPO este viernes que no hay interlocución con el máximo tribunal.
Si la Corte falla y confirma la sentencia contra Cristina antes del 19 de Julio, no podrá ser candidata a diputada en las elecciones bonaerenses de septiembre, donde las encuestas indican que tiene buenas probabilidades de ganar en la Tercera Sección Electoral, esto es el sur del Conurbano, la zona más popular y poblada de la provincia.
Un camarista reconoció a LPO que existen presiones de sectores del poder para que Cristina vaya presa, algo que también habían admitido los senadores cuando se trató el frustrado proyecto de Ficha Limpia en el Senado. «En Argentina siempre es un mal momento para fallar, porque hay elecciones cada dos años y casi siempre estamos en campaña electoral», matizó un juez federal para conceder que la Corte puede resolver el caso ahora.
Ante la posibilidad de la detención de la ex presidenta, el kirchnerismo analizaba este viernes movilizarse. El diputado kirchnerista y secretario General de La Bancaria, Sergio Palazzo, afirmó ante la prensa que «tiene que haber una expresión popular que le diga basta de este tipo de manejos arbitrarios para imponer a los argentinos quién puede ser candidato y quién no». En el despacho de una colega suya del bloque peronista, confirmaron a LPO que la definición del momento en el peronismo es de «alerta y movilización».
Tiene que haber una expresión popular que le diga basta de este tipo de manejos arbitrarios para imponer a los argentinos quién puede ser candidato y quién no.
Un juez de Comodoro Py que conoce a la ex presidenta afirmó a LP que Cristina esperaba este escenario. «De un momento a otro, los jueces pueden dar ‘enter’ para fallar o posponer la sentencia, ella lo sabía y por eso apuró su candidatura y los trató de guardia pretoriana», dijo en referencia al reportaje que le concedió Cristina a C5N el pasado lunes.

Como sea, las posibles consecuencias de una detención de Cristina eran analizadas este viernes en todo el sistema político. Una lectura es que el peronismo podría hacer una pausa en sus divisiones para defender a la actual presidenta del PJ, principal partido de la oposición, lo que también sugiere un posible impacto internacional.
«De la Rúa metió preso a Menem para tapar el ajuste y no le sirvió de nada», recordó un dirigente peronista de larga trayectoria y agregó: «en Brasil lo metieron preso a Lula, parecía que no pasaba nada y después volvió a ser electo Presidente». En efecto, el impacto de una detención de Cristina sobre el gobierno de Milei no es un tema menor.
«Es una bomba neutrónica en el peronismo», opinó con una mirada menos romántica uno de los dirigentes más importantes de esa fuerza. El gobierno, en tanto, podría experimentar el relativo alivio de no arriesgarse a una derrota en la tercera sección electoral que, como publicó LPO, amenaza con garantizarle la victoria al kirchnerismo en el resultado global del territorio bonaerense si la diferencia es abismal.
El peronismo, por supuesto, planteará la detención de Cristina como la proscripción de la ex presidenta. Esa es la razón por la que hasta un diputado macrista repetía hasta el cansancio cuando se discutió el proyecto de Ficha Limpia que «a Cristina hay que ganarle en las urnas».
Una decisión inminente de la Corte iría en contra de la jurisprudencia no escrita del máximo tribunal, acerca que no resuelve casos de corrupción que afecten o inhiban los derechos políticos de un posible candidato en un año electoral.
Como sea, las opciones de la Corte serían la de negarse a tomar el caso, por medio de la apelación del artículo 280 del Código Penal, y dejar firme la sentencia de la Cámara de Casación o abrir los recursos de queja y revocarlos, con el mismo desenlace para la ex presidenta. Pero los ministros también podrían revisar los recursos y tomar el de la fiscalía, que duplica la condena a 12 años bajo la figura de asociación ilícita, lo cual dilataría el proceso y otorgaría más tiempo a Cristina.
Con información de la Política On-Line
-
PROVINCIALES2 días atrás
En el Día Mundial del Ambiente se rinde homenaje a la naturaleza con un Escenario Verde
-
RIO TURBIO2 días atrás
Valdelen se prepara para la Temporada Invernal 2025
-
PROVINCIALES1 día atrás
El Gobierno provincial impulsa medidas para fortalecer la competitividad del sector pesquero y destrabar el conflicto con SOMU
-
PROVINCIALES1 día atrás
Leguizamón visitó hospitales, escuelas y entes públicos en Río Turbio y 28 de noviembre