En un paso significativo hacia la preservación del patrimonio cultural, la Escuela de Danzas Folclóricas «Pilmaiquen» se instala en el edificio de la Planta Alta del Pabellón 7, cedido en comodato por 10 años por el intendente Darío Menna. Con el apoyo de la comunidad y liderados por Pablo Nores, la reconstrucción y adaptación del espacio para albergar la escuela ya están en marcha, marcando el inicio de una emocionante nueva etapa.

Caminamos por el principio de una gran historia en Río Turbio, donde el edificio de la Planta Alta del Pabellón 7 se transformará en el hogar de la Escuela de Danzas Folclóricas «Pilmaiquen». Este hito se materializó gracias a la generosa cesión del espacio en comodato por 10 años por parte del intendente Darío Menna.

La comisión de padres, encabezada por Pablo Nores, asumió el desafío de la reconstrucción y adaptación del edificio para dar vida a la escuela. La visión incluye un sector administrativo, una sala de profesores, cuatro salones de baile, un dormitorio para capacitadores, sala de malambo, depósito de escenografía, dos vestuarios, un depósito adicional, una cocina, un lavadero y dos amplios baños. Este ambicioso proyecto se erige como un faro cultural en la ciudad.

Aunque se vislumbra un camino desafiante, la comunidad confía en el éxito del proyecto y se prepara para contribuir a su realización. La nueva sede no solo busca ofrecer un espacio educativo sino también atender al esperado aumento en la matrícula de alumnos. «Pilmaiquen» se proyecta como un impulsor de crecimiento cultural en Río Turbio, donde nuevas generaciones arraigarán sus tradiciones para promover y preservar el rico patrimonio cultural de la región.