Conectarse con nosotros

NACIONALES

Alberto Fernández inició la gira por Rusia y China y Cristina Fernandez asumió la Presidencia

Publicado

el



La primera actividad del Presidente será el jueves cuando mantendrá una reunión privada seguida por un almuerzo de trabajo con Putin.

El presidente Alberto Fernández dará comienzo a la gira en la que recorrerá Rusia, China y Barbados para reunirse con sus pares Vladimir Putin y Xi Jinping, así como con la primera ministra del país caribeño, Mia Mottley, con quienes firmará acuerdos comerciales y de cooperación.

El vuelo del mandatario y su delegación partía a las 22, por lo que desde ese momento la vicepresidenta Cristina Kirchner quedará a cargo del Poder Ejecutivo.

Coincide con el pico de tensión dentro del Frente de Todos entre el kirchnerismo y el sector más cercano al mandatario por el acuerdo con el FMI, la que generó la renuncia de Máximo Kirchner a la jefatura del bloque de diputados.

La comitiva oficial sufrió dos bajas en las últimas horas por casos positivos de Covid: dieron positivo la viceministra de la Cancillería, Cecilia Todesca, y el secretario general de la Presidencia, Julio Vitobello.

Por su parte, el ministro de Economía, Martín Guzmán, fue la última inclusión de la comitiva, que integrarán también el canciller Santiago Cafiero y los gobernadores de Río Negro, Arabela Carreras; Buenos Aires, Axel Kicillof, y Catamarca, Raúl Jalil.

Formarán parte además la portavoz de la Presidencia, Gabriela Cerruti; la secretaria de Deportes, Inés Arrondo; el senador Adolfo Rodríguez Saá, el diputado Eduardo Valdés, la asesora presidencial Cecilia Nicolini, y el intendente de José C. Paz, Mario Ishii.

La primera actividad oficial del viaje será el jueves a las 13 (7, hora argentina) cuando Fernández mantendrá una reunión privada seguida por un almuerzo de trabajo con Putin en el Kremlin.

Al finalizar el encuentro, ambos mandatarios brindarán una declaración conjunta a la prensa.

A las 18.30 del mismo día (12.30 de la Argentina), el Presidente partirá hacia Beijing, adonde viaja invitado especialmente por Xi Jinping para asistir a la inauguración de los Juegos Olímpicos de Invierno.

El viernes, Fernández participará a las 15 (4 de la Argentina), de forma virtual, de la ceremonia en la que le será otorgado el título de Profesor Honoris Causa de la Universidad de Tsinghua.

Luego, a las 9 hora argentina y junto al embajador en China, Sabino Vaca Narvaja, el Presidente presenciará la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de Invierno que se desarrollará en el Estadio Nacional de Beijing.

El sábado, desde las 22.30 de la Argentina, Fernández visitará el Museo del Palacio, ubicado en la llamada Ciudad Prohibida, un complejo de casi mil edificios construido a principios del siglo XV y que hasta comienzos del siglo XX fue el centro político de China y la residencia de los emperadores. Después, a tan solo 1500 metros de allí, en la Plaza de Tiananmen, realizará una ofrenda floral en el mausoleo de Mao Zedong.

Más tarde, a la 1.15 del domingo en la Argentina, el Presidente será recibido en el Gran Salón del Pueblo, donde se ofrecerá un almuerzo en honor las jefas y los jefes de Estado que concurran a la inauguración de los JJ OO. A las 8.15, en tanto, se reunirá con la delegación de deportistas argentinos que participarán en el certamen.

El encuentro entre Fernández y Xi Jinping se desarrollará el domingo, a las 0.40 de la Argentina, en el Gran Salón del Pueblo.

La actividad oficial en el país asiático finalizará ese mismo día con visitas al Centro Tecnológico Huawei y a la gran Gran Muralla de Mutianyu, previo a tomar un vuelo que llevará al Presidente y su comitiva a Bridgetown, Barbados.

En la isla caribeña, el encuentro con la primera ministra Mia Mottley tendrá lugar el martes a las 8 de la Argentina y será seguido de una reunión con representantes de la Organización de Estados del Caribe Oriental (OECS, por su sigla en inglés).


NACIONALES

Ida y vuelta de los aumentos en mayo

Publicado

el


El Gobierno postergó subas de luz, gas e impuesto a los combustibles para amortiguar otros aumentos. Colectivos y subtes, en espera.


Por Mara Pedrazzoli

Entre varias idas y vueltas respecto a los aumentos de precios liberados (y regulados) por el Gobierno, los incrementos programados para mayo impactarán directamente sobre consumos esenciales como combustibles, transporte, el servicio de internet y comunicación, colegios privados en el Área Metropolitana de Buenos Aires (Amba) y alquileres. Se suman a los amplicados entre enero y abril, de modo que inclusive en el caso de las subas postergadas –como en luz, gas y algunas prepagas-, la comparación contra las tarifas en igual mes del año anterior todavía superan a la inflación general. Según el Indec, el aumento en los precios “regulados” acumulado en el primer trimestre del año fue del 81 por ciento interanual, mientras el nivel general de inflación ascendió a 51 por ciento.

Para empezar, en la mañana del miércoles 1 de mayo las petrolerassubieron el valor de los combustibles entre 4 y 5 por ciento. Un ajuste que obedeció al incremento en los costos por la suba del dólar -topeada por el Gobierno en 2 por ciento mensual- y a la recomposición para alcanzar niveles cercanos a la “paridad de exportación”, hoy unos 20 dólares arriba de los precios internos. En principio, los combustibles iban a subir casi 10 por ciento en mayo, dado el traslado por la corrección de los Impuestos a los Combustibles Líquidos (ICL), que fue suspendida hasta junio por el Gobierno por una decisión de último momento. Las estimaciones del Instituto Argentino de Análisis Fiscal evidenciaban que este ajuste del ICL hubiera sido más alto pues correspondía aplicar los precios del cuarto trimestre del año pasado, que habían rebotado debido a la devaluación de diciembre.

Así, el aumento aplicado inicialmente por YPF estuvo por debajo de las remarcaciones promedio de marzo y abril del 6 por ciento mensual. En mayo, la nafta súper en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (CABA) pasó de 837 a unos 870 pesos, mientras la nafta premium avanzó de 1.033 a 1.074 pesos. Mientras el gasoil común dejó de costar 883 para pasar a venderse a un valor cercano a 918 pesos, y el gasoil premium avanzó de 1.123 a 1.167 pesos, considerando los valores más económicos del mercado. Tomando como ejemplo CABA, en los últimos doce meses el precio del litro de nafta súper pasó de 163,10 a 744 pesos, con lo que registró un incremento total del 356 por ciento en el período.

En el caso de los servicios públicos de luz y de gas, a partir de este miércoles debía regir la indexación mensual atada a la inflación que estipulaba la nueva fórmula sancionada por el Gobierno. Sin embargo, hasta el martes a la noche los entes reguladores, Enre y Enargas, no habían recibido la información correspondiente a los nuevos cuadros tarifarios. Ante la sorpresa de las empresas del sector, el Gobierno decidió pisar los ajustes que involucraban subas de entre 10 y 12 por ciento para las distribuidoras de energía eléctrica y gas y para las transportistas de gas. Dichos aumentos representaban un incremento cercano al 5 por ciento en las facturas finales de los servicios que el oficialismo prefirió evitar. Igualmente, desde enero acumulan un alza del 150 y 450 por ciento, respectivamente.

En un nuevo traspiés heterodoxo del ministro de Economía, Luis Caputo, decidió mantener las tarifas pisadas al menos un mes para ayudar a la desaceleración inflacionaria. La regulación de los servicios esenciales comenzó a ser entendida por el oficialismo desde una lógica menos simplista y dogmática de lo que intrepreta sobre la inflación, como un fenómeno exclusivamente monetario.En la mañana del miércoles 1 de mayo, el ministro escribió en su cuenta en la red X: “Estamos cómodos en lo fiscal, priorizamos bajar la inflación y no cargar más con gastos de momento a la clase media”, para explicar las postergaciones de los aumentos, con lo cual también reconoció que dejar de emitir para cubrir el déficit no condujo a la estabilidad de precios como había asegurado. Ahora necesita detener la suba de tarifas.

El congelamiento del ICL, de los aumentos en la luz y el gas, sumados a la exigencia de rebaja en las cuotas de siete medicinas prepagas deben leerse como un llamado de atención dentro de la propia lógica del Gobierno. Las idas y vueltas en materia de liberalización de precios minan el discurso libertario y su apoyo social ante la inmanente erosión en el poder adquisitivo de los salarios. 

El Gobierno ya había suspendido la aplicación de una fórmula indexatoria en su debut con la tarifa de los colectivos y trenes en el Amba durante abril. Ahora en mayo es una incógnita qué pasará con los colectivos ante la amenaza de un paro de choferes este jueves. Los colectivos ya sufrieron un alza del 29 por ciento en febrero.

En tanto, el próximo 6 de mayo sí subirá un 54 por ciento el boleto de tren en el Amba. El esquema tarifario para los servicios que incluyen las líneas Sarmiento, Roca, Mitre, San Martín, Belgrano Sur, Belgrano Norte, Urquiza y Tren de la Costa quedará de la siguiente manera: con tarjeta SUBE registrada en la primera sección valdrá 200 pesos, en la segunda 260 pesos y en la tercera 320 pesos, mientras con tarjeta sin registrara costará el doble, y algo menos de la mitad con la tarifa social.

En el caso del boleto de subte, se espera un aumento del 359 por ciento, pues pasará de 125 a 574 pesos aunque se desconoce a partir de qué fecha concreta del mes por cuestiones administrativas. El Gobierno porteño demoró la publicación de la medida en el Boletín Oficial y aún no confirmó cuándo lo hará, con lo cual también se desconoce si luego se aplicará el segundo incremento previsto para el 15 de mayo, que lleva el pasaje a 667 pesos. El siguiente incremento estaba anunciado para el 1 de junio, hasta los 757 pesos.

Asimismo, los colegios privados bonaerenses aplicarán un incremento del 6,7 por ciento en sus cuotas, con variaciones dependiendo del nivel educativo y la subvención estatal. Los jardines con 100 por ciento de aporte costarán hasta 17.500 pesos, mientras la secundaria con subsidio del 40 por ciento hasta 102.500 pesos.

También las tarifas de internet, cable y telefonía sufrirán un ajuste que oscilará entre el 10 y el 20 por ciento dependiendo del proveedor y el tipo de servicio contratado. Y por último, los alquileres que quedaron dentro de la Ley de Contratos de Locación tendrán un incremento del 221 por ciento mientras aquellos firmados después de la derogación tendrán un ajuste “según el mercado” y las condiciones particulares de cada caso.


Seguir leyendo

Más leídas - últimas 48Hs.