Conectarse con nosotros

NACIONALES

Acuerdo con el FMI: Martín Guzmán y Juan Manzur y los detalles del arreglo

Publicado

el


El ministro de Economía reafirmó que el acuerdo que se firmará con el Fondo será de facilidades extendidas y no un stand by, como el suscrito en 2018. Los objetivos en cuanto a déficit fiscal, reservas, inflación y política monetaria. «No habrá ninguna reforma laboral ni privatización de empresas públicas ni afección a las jubilaciones», enumeró y aseguró que «no va a haber ningún salto cambiario».

El ministro de Economía, Martín Guzmán, y el jefe de Gabinete, Juan Manzur, dieron los detalles del acuerdo al que el gobierno nacional arribó con el Fondo Monetario (FMI), luego de una serie de largas y duras negociaciones. “Este acuerdo va a permitir que la Argentina continúe con el crecimiento”, por eso no habrá ninguna reforma laboral ni privatización de empresas públicas ni afectación a las jubilaciones”, aseguró el ministro.

«Se llegó al mejor acuerdo que se podía llegar», definió Guzmán antes de enumerar la letra de los detalles que, una vez que estén redactados los memorandos, serán enviados al Congreso Nacional.

El ministo y el Jefe de gabinete explicaron que, tal como anticipó el presidente Alberto Fernández, el acuerdo “no condicionará” las principales líneas de la política trazada por el gobierno del Frente de Todos, fundamentada en el crecimiento y desarrollo de la economía tras la debacle provocada por la administración de Mauricio Macri y la pandemia de coronavirus.

Los aspectos centrales y las cuestiones técnicas del acuerdo con el que la Argentina cumple sus obligaciones con el organismo fueron enumeradas por el titular del Palacio de Hacienda.

El monto del financiamiento es de 44,5 mil millones de dólares

“Buscamos tener el apoyo internacional para refinanciar la deuda sin socavar las oportunidades de desarrollo de nuestra nación –puntualizó–. Para esto, “necesitamos el apoyo del mundo para lo que está por venir”.

“Nunca estuvo en discusión que se buscaba un programa de facilidades extendidas para refinanciar los vencimientos del programa stand by al que arribó el gobierno anterior. El monto del financiamiento es equivalente a ese acuerdo, alrededor de 44,5 mil millones de dólares”, detalló Guzmán.

Una vez que el programa esté aprobado por el Congreso y el Directorio del FMI, comenzarán los desembolsos que se realizarán de acuerdo al «cronograma de pagos definidos por el gobierno anterior. Vamos a contar con dinero para pagar lo que venza y acumular reservas por el remanente», detalló el ministro.

Los bloques del acuerdo: fiscal, monetario, inflación y crecimiento

El marco general tiene cuatro bloques: el fiscal, el monetario, el de la inflación y el de políticas de crecimiento. Tendrá una duración de dos años y medio y aún hay que trabajar los memorandos de entendimiento que se elaborarán en las próximas semanas.

Cómo se va llegar al equilibrio fiscal  

Desde el punto de vista macroeconómico, está el subloque fiscal: “Se logró que la Argentina pueda llegar a un acuerdo sin políticas de ajuste fiscal”, aseguró Guzmán, que aclaró que el Estado podrá jugar un rol «moderadamente expansivo».

En este sentido, se buscará una reducción gradual del déficit fiscal: se proyecta un déficit primario de 2,5 del PBI para 2022; de 1,9 para 2023 y de 0,9 para 2024.

Según explicó el ministro, el Estado mantendrá la expansión de la inversión pública, incluida especialmente la dedicada a Ciencia y Técnica. Para ir equilibrando las cuentas fiscales, además del crecimiento de la economía, cuenta con llevar adelante una mejora en la administración tributaria, que incluye un ataque «a los problemas de lavado de dinero y evasión», sobre todo de las grandes contribuyentes.

«No habrá ninguna reforma laboral ni privatización de empresas públicas ni afectación a las jubilaciones», aseguró Guzmán.

Asistencia del Tesoro y tasas de interés

En el bloque monetario y financiero, “va a haber una reducción gradual pero decidida de la asistencia monetaria del Banco Central al Tesoro nacional”. En 2022 el financiamiento al Tesoro será del 1 por ciento del PBI, del 0,6 en 2023 y deberá llegar a cero en 2024.

En materia de política monetaria se acordó un marco que tiene como objetivo diseñar «una estructura de tasas de interés reales que redunde en valores positivos».

En el frente financiero “se va a continuar con la reconstrucción del mercado de deuda pública en moneda nacional”. “Hoy el gobierno nacional tiene la capacidad para hacerlo”, aseguró.

Inflación y emisión

En materia de inflación, se acordó un “bloque integral” que interpreta ese problema como «un fenómeno multicausal».

También se buscará «mantener el rol coordinador del Estado para anclar las expectativas sectoriales». Para ello, el rol de las políticas de acuerdos de precios es fundamental y van a tener un rol importante en el esquema inflacionario. El programa durará dos años y medio y los acuerdos serán conversados entre el gobierno y los empresarios.

Como planteó en el bloque fiscal, la reducción de la emisión monetaria y las tasas positivas de interés contribuirán a «Mejorar el perfil de financiamiento de las políticas públicas” que también redundará en un control paulatino de la inflación.

Devaluación y reservas

El funcionario subrayó que «no va a haber ningún salto cambiario». A lo que se apunta es a «medidas que favorezcan el ingreso de divisas para el desarrollo».

El Gobierno «va a seguir en la línea que se planteó y continuará con la política de acumulación de reservas. Se plantea en ese plano una una meta de crecimiento de las reservas de 5 mil millones de dólares para 2022″. Para esto habrá regulaciones en la cuenta financiera para desalentar el ingreso y salida de capitales especulativos.

El fracaso del programa de Macri y el FMI

Por otra parte, Guzmán recordó que fue Juntos por el Cambio el responsable de tomar un “préstamo récord” de 57 mil millones de dólares del que se desembolsaron casi 45 mil millones. “El programa fue un profundo fracaso” para la Argentina, algo que “reconoció el propio FMI”.

Ese dinero se utilizó para financiar la salida de capitales en la Argentina y pagar deuda que estaba en situación de insostenibilidad, dejó una situación con una carga de deuda aplastante para las posibilidades de desarrollo y en una condición de dependencia” al país.

En este panorama, lo que el gobierno del Frente de Todos buscó fue “generar un escenario que de certidumbres que abra un camino transitable” y “sembrar condiciones para construir futuro”.

«Como en toda negociación, cada uno planteó al principio sus condiciones de máxima y terminamos en un lugar razonable, que nos permite mantener nuestro sendero de crecimiento», aseguró Guzmán. «Lo otro, era un salto a lo desconocido», concluyó.

Apoyo de los gobernadores

Manzur manifestó que no tenía dudas del «acompañamiento de la totalidad de los gobernadores y gobernadoras de la Argentina» al entendimiento con el Fondo.

Durante la conferencia, el jefe de Gabinete destacó que al acuerdo se arribó “después de mucho trabajo e intercambios de propuestas y borradores” y cuestionó a la administración de Juntos por el Cambio, que contrajo la deuda.

“Lo que hizo el gobierno del ex presidente Macri es una tragedia para la Argentina, endeudó irresponsablemente al país cercenándolo de propuestas y de un futuro mejor”, sentenció. «Este acuerdo es un punto de inflexión para dejar atrás la economía quebrada que dejó el gobierno anterior, a lo que sse sumó enseguida la pandemia», sintetizó.

https://iframely.pagina12.com.ar/?jwsource=cl


NACIONALES

Mondino y su brutalidad: «Los chinos son todos iguales»

Publicado

el


La ministra de Relaciones Exteriores exhibió su intelecto en la cumbre de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) que se celebra en París. Allí confesó que no puede distinguir las profesiones de los orientales porque, para ella, tienen el mismo aspecto físico. Lo hizo después de mantener una gira justamente por China, con la intención de negociar el swap con el gigante asiático.

La canciller Diana Mondino se refirió este jueves a la base china en la Argentina. Lo hizo al ser consultada por la presencia de militares del gigante asiático. Mondino respondio con total brutalidad: dijo que no se pudo identificar si participan civiles o militares porque «son todos chinos, son todos iguales».

La cuestión hace al realineamiento argentino con los Estados Unidos. Javier Milei quiere emular las relaciones carnales que mantuvo Carlos Menem en los años 90. Es por eso mismo que, desde hace semanas, el Gobierno nacional amaña todo lo referido a la base científica que nuestro país comparte con China en Neuquén, al punto de mandar una delegación a investigar si se haya algo oculto, pese a que el gigante asiático comparte todos los resultados de las investigaciones con los organismos nacionales.

En ese contexto, Mondino aseguró este jueves que «los chinos son todos iguales», al señalar que no habían identificado a personal militar en la base espacial de ese país en Neuquén. «Los que fueron de investigación no identificaron que hubiera personal militar. Son chinos, son todos iguales», indicó la ministra de Relaciones Exteriores en declaraciones a Clarín.

La frase surgió ante una pregunta sobre si se había identificado personal militar en la base ubicada en la Patagonia argentina, en la que puso especial atención el gobierno de los Estados Unidos y fue tema de conversación con la generala del Comando Sur, Laura Richardson, a principios de abril.

«Ya se han hecho inspecciones en la Estación Espacial China y la Europea. Fue el mismo equipo a ambas y en la misma semana, esos equipos no percibieron nada raro», explicó Mondino.

Pato criollo

No es la primera vez que Mondino no logra ocultar su brutalidad. Semanas atrás, sentada en la mesa de Mirta Legrand, la canciller contó -con una sonrisa de dientes perfectos- por qué para ella es absurdo que los jubilados tengan acceso a un crédito: “Por definición todos algún día nos vamos a morir y si sos un jubilado de determinada edad casi seguro que te vas a morir”. Su argumento corrobora el ABC del gobierno libertario de monetizar la vida al máximo y que eso sea por definición el criterio de lo que sirve y lo que no, según cómo se venda o cómo se pueda pagar.

Pero se acumulan los casos. Por ejemplo cuando pidió que fogoneó a los trolls para que tengan más comentarios una respuesta que el tuit original de Andrés Manuel López Obrador. Ocurrió cuando el presidente mexicano denominó ignorante a Milei y una de las cuentas de las que suele tener interacción con el mandatario argentino (@usdtermo) desafió a que una foto de Milei iba a tener «más me gusta». En vez de apaciguar las aguas, esto publicó Mondino.

Y en el repaso también se pueden citar la vez que dejó un manto de sospecha -sin ninguna prueba- de supuestos «infiltrados» que iban a desestabilizar al presidente Javier Milei en su discurso de apertura en el Congreso o la vez que ni siquiera se puso colorada al apuntar contra Natalia Zaracho porque la diputada y cartonera -que nació en un contexto de vulnerabilidad social- no terminó el secundario.

Malvinas

La cuestión Malvinas merece un párrafo aparte. Suelta de lengua, Mondino dijo que las quejas formales del país contra Inglaterra son, apenas, «cartitas», y que si se tiene que enfrentar con su par inglés en lo relativo a Malvinas, lo mejor es hacerlo con sus «chicanas tuiteras». 

Lo hizo en una entrevista televisiva Ante la consulta de una periodista sobre las acciones de la Cancillería ante el viaje de David Cameron -ministro de Asuntos Exteriores del Reino Unido- a las Malvinas, la canciller dijo que «no había muchas opciones» porque «no pasan por territorio argentino para ir». «¿Qué le vamos a hacer, con un misil bajar el avión», comentó, con acento e intento de humor cordobés.

Cuando la repregunta estuvo orientada a por qué no hubo una queja formal del Estado nacional, Mondino adelantó su reflexión. «A un inglés reírse con el idioma inglés, le duele mucho más que una de las tantas cartitas que Argentina continuamente ha enviado», opinó y consideró que su chicana -había posteado, en Twitter, que le agradecía a Cameron su visita a la Argentina-, «le duele mucho más que otra cartitas más».

Hasta ahora se desconoce si alguno de los asesores con los que cuenta la ministra le soplaron al oído que ni el primer ministro de Inglaterra ni siquiera su canciller la siguen en la red favorita de los ultraderechistas. Es decir, quizás ni acusaron recibo de la «chicana». 

Antes de París, Pekín

Las últimas declaraciones de Mondino llegaron desde París, donde participa de un encuentro de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE). Pero la canciller no llegó a Francia desde Buenos Aires sino, justamente, había pasado semanas en la capital china donde se se reunió con el canciller Wang Yi.

El motivo de la gira giraba en torno a recomponer las relaciones tras las provocaciones del Gobierno nacional, que iban desde las acusaciones del presidente (augurando que no iba a mantener relaciones con «comunistas) y de las fotos de la propia canciller con diplomáticos de Taiwán, un tópico sensible para la geopolítica del gigante asiático. Pero, sobre todo, estuvo marcado por la necesidad de que el Gobierno chino renegocie el pago del swap para no generar un sismo en las reservas monetarias argentinas.

La pelota ahora quedó en Pekin. Habrá que ver si toman estas últimas declaraciones como un mero comentario al paso o si resuelven tomar medidas drásticas, por ejemplo, revisar el historial de créditos y exigirle al país el pago efectivo e inmediato de los mismos: se podrían amparar que, para ellos, las deudas «son todas iguales».


Seguir leyendo

Más leídas - últimas 48Hs.